Taxistas de Ibiza se están encontrando este verano con un insólito y gravísimo problema: las compañías no quieren asegurarles, lo que lleva a algunos conductores a no poder trabajar en estos días de plena temporada. Julián Povedano, de la asociación El Arca, explicó ayer que todo ha comenzado con la implantación en la isla de las VTC, y más en concreto de los Uber.
«Las aseguradoras nos meten en la misma categoría y estos vehículos, según parece, sufren muchos incidentes. Ahora estamos desprotegidos totalmente», denunció.
Este taxista relató que, tras tener su taxi varios días en el taller y lograr pasar la ITV, intentó también contratar un nuevo seguro. «Llevo una semana con el coche parado. Llamo a la compañía y me dice que no me aseguran», reiteró.
Sus compañeros de la Federación mallorquina le sugirieron varias soluciones como contactar con el Consorcio de Compensación de Seguros, aunque ello le supondría pasar de pagar de 1.500 a 3.800 euros, sin disponer como hasta ahora de servicio de grúa o asistencia jurídica. «Las principales compañías quieren sacar los taxis que tienen», insistió también.
Según Povedano, tras más de 30 años de profesión, nunca se ha visto en una situación igual y aseguró que son muchos los taxistas que pueden sufrir un problema similar. En el caso de los estacionales, todavía es peor, según el responsable de El Arca.
Con tres trabajadores dependiendo de este taxi, las pérdidas pueden ascender a unos 5.000 euros en una sola semana, según calculó también. Alejandro Cardell, de la Asociación de Taxistas Autónomos de Ibiza, reconoció ayer que algunos conductores habían estado parados durante varios días por este motivo, aunque el problema no solamente se registra en Ibiza, sino en todo el país, según comentó.
«Nos han puesto en el mismo casillero que las VTC, que en otros lugares tienen mucha siniestralidad, y si ya el taxi en sí presenta ese historial porque pasamos muchas horas en la carretera, cada vez se nos va complicando todo. Hemos sufrido problemas en este sentido a principios de temporada», explicó el presidente.
Cardell relató cómo algunos taxistas que han cambiado de vehículo en mitad del verano han tenido que invertir «días y días llamando a puertas» para conseguir un seguro y, en ocasiones, con unas condiciones abusivas. «Estamos indignados porque no deja de ser una discriminación», reiteró.
Aunque en clave estatal han comenzado a moverse hilos para encontrar una solución, ésta todavía no se ha producido, concluyó.
En Élite Corsaris d´Eivissa dudaron de que ahora mismo haya taxis parados por esta insólita razón, aunque reconocieron que determinadas aseguradoras «nos han ido echando y no nos renovaban». En otros casos, a un profesional que estaba pagando un seguro a todo riesgo de unos 3.800 euros, en el último año la misma aseguradora le reclamaba 5.500 euros, un precio «inasumible, un robo». Finalmente, este conductor encontró un seguro básico por 800 euros al año.
También lamentaron desde Élite que la problemática se está produciendo en todo el país al estar los taxis englobados en la misma categoría que las VTC.
Nada más conocer la problemática, el concejal Rubén Sousa contactó con la Conselleria balear de Movilidad que «está explorando algunas vías, aunque es un tema nacional».
«Vamos a intentar hacer lo posible para que este problema termine. Es cierto que se agrava en Ibiza por las licencias temporales, que sufren más dificultades para conseguir un seguro. Tenemos localizadas cuatro licencias que están paradas porque el vehículo está roto y, al querer usar el conductor un taxi de sustitución, no ha podido dar de alta el seguro», concluyó.