El Ayuntamiento de Ibiza modificará la ordenanza reguladora de la entrada de vehículos a las aceras y la reserva de la vía pública para las operaciones de carga y descarga. La tercera teniente alcalde de Vila, Blanca Hernández, explicará esta propuesta al pleno ordinario de septiembre, que se celebrará el lunes 30, a partir de las 9.30 horas.
La vigente Ordenanza Municipal Reguladora de la entrada de vehículos mediante las aceras y/o vías públicas, reserva de la vía pública por carga y descarga de uso exclusivo y de uso público, fue aprobada en fecha 16 de julio de 2015 y , 9 años después, se considera necesario llevar a cabo una serie de modificaciones de la misma para actualizar y mejorarla de la forma más adecuada para responder a las necesidades actuales, teniendo en cuenta la entrada en vigor de reformas normativas como el Decreto 1/2024, de 5 de enero, por el que se aprueba el Reglamento del procedimiento sancionador de la Administración de la comunidad autónoma de las Illes Balears.
«Con los cambios que aportamos a la normativa se dará solución a las diversas tipologías de solicitudes que no se regulan ahora, introduciendo modificaciones pertinentes y la incorporaciones de nuevos elementos para la delimitación de los vados, por tal de mejorar la accesibilidad y la seguridad de la ciudadanía», ha valorado Hernández, quien ha añadido que esta ordenación de los vados también responde a objetivos de embellecimientos y harmonización.
En concreto, en la nueva ordenanza se quiere introducir la delimitación de los vados a ambos lados con topes de tierra de ruedas de vehículos, autorizando los pilones de hormigón actuales en casos excepcionales, así como la modificación de la señalización horizontal y la construcción de una nueva acera en vados permanentes con línea de aparcamiento.
Por último, la tercera teniente de alcalde del Consistorio de Eivissa puntualiza que las autorizaciones y licencias otorgadas con anterioridad a la entrada en vigor de las modificaciones de la futura ordenanza continuarán vigentes. Sin embargo, Hernández advierte que quedarán sujetos a los cambios aprobados, disponiendo del plazo de un año para adaptarse a las nuevas determinaciones. Las solicitudes presentadas con anterioridad al momento de entrada en vigor de la modificación de la Ordenanza sobre las que no hubiera recaído resolución, serán tramitadas y resueltas conforme a la nueva norma.