Alrededor de 25.000 personas disfrutarán, entre los días 11 y 14 de octubre, de los cierres de las grandes discotecas. Será un fin de semana «bastante intenso», según reconoció ayer la Asociación Ocio de Ibiza (AOI).
Estos eventos tendrán lugar un poco más tarde de lo habitual y las previsiones son «muy buenas» en cuanto a asistencia y, por tanto, en relación a la facturación puesto que algunas fiestas han colgado ya el cartel de ‘sold out’.
«Comenzamos en abril y nos vamos a mitad de octubre. Históricamente, es casi mes y medio más de lo que solían abrir las discotecas. Hemos puesto nuestro granito de arena para desestacionalizar», comentó el gerente José Luis Benítez.
Con una temporada «muy positiva» para el sector, la gran mayoría de empresarios replicarán las cifras registradas en 2023, un año considerado «histórico» para los establecimientos de ocio de Ibiza. Una vez más, según el gerente, la falta de vivienda para los trabajadores del sector ha sido este verano un auténtico quebradero de cabeza para los propietarios de las discotecas.
«Eso es el gran problema que desde hace años nos ha traído el alquiler turístico ilegal. Todo el mundo sabe que está prohibido, pero lo sigue haciendo y no es positivo ni para los residentes ni para los trabajadores», lamentó.
En relación a los últimos movimientos surgidos en Ibiza contra el turismo o la masificación, desde AOI aseguraron sentirse «siempre» la diana de estas críticas, recibiendo incluso comentarios negativos porque algunos empresarios han alquilado bloques de viviendas para sus trabajadores. «Por un lado se quejan de que quitamos vivienda del mercado, según ellos, pero también nos critican si no se procura que los empleados tengan un buen sitio para dormir. Cualquier cosa que haga el sector, éste siempre está señalado, aunque en los últimos diez años el ocio ha cambiado y hay un respeto prácticamente absoluto. El problema es que estamos en una época en que molesta todo y siempre somos esa diana perfecta», reconoció.
Benítez insistió en que todas las opiniones «son respetables, incluso la nuestra» y esos movimientos pueden tener parte de razón en algunas reivindicaciones, pero en otras «el Consell está ya trabajando muchísimo para intentar solucionarlas, aunque no es fácil».
«Parece que la gente no recuerda bien que aquí vivimos exclusivamente del turismo porque no hay otro tipo de industria. No veo que se pueda impulsar un cambio de modelo, aunque sí mejorarlo. Hace unos años se hablaba de temporadas extremadamente cortas y ahora que en octubre la isla tiene turismo, eso nos molesta», relató.
Año 2025
El gerente no dudó en asegurar que la aprobación en la isla de una moratoria para nuevas discotecas sería una medida positiva, puntualizando que, aunque la próxima temporada está prevista la apertura de UNVRS, el nuevo local abrirá sus puertas en el antiguo Privilege ocupando un espacio que ya tenía ese mismo uso.
Sobre las intenciones de un empresario de reabrir en la isla un KU Ibiza, Benítez valoró que «no será lo mismo», aunque cada uno es libre de llevar a cabo sus proyectos.
Cabe recordar que recientemente se anunció que un grupo promotor se había propuesto reabrir un KU Ibiza, en una iniciativa liderada por un reconocido empresario del ocio nocturno, Santiago Llorens, que fue director de Pacha en Madrid y Barcelona y que también estuvo al frente de la emblemática sala Joy Eslava de Madrid.
La compañía está buscando activamente localizaciones en Ibiza con vistas al verano de 2025. Por el momento, ha habido conversaciones con grupos hosteleros de la isla y varias empresas se han interesado por emprender el proyecto en la modalidad de franquicia. KU Ibiza regresaría como discoteca en caso de encontrar un local del tamaño apropiado, pero también podría plasmarse en forma de restaurante o ‘beach club’.