Los ibicencos verán cómo a partir del año que viene la tasa que pagan por la recogida de basuras aumenta de forma muy notable. Un incremento en los impuestos municipales que los consistorios se han visto obligados a ejecutar, ya que es una medida establecida por la Ley 7/2022 de residuos y suelos contaminados para una economía circular y que implica que los ayuntamientos deban repercutir la totalidad del coste del servicio de recogida de basura en los contribuyentes.
Hasta ahora, los ciudadanos solo pagaban una parte de este servicio, mientras que el resto se sufragaba con otros fondos de los consistorios. Esto ya no va a ser así a partir de 2025 ya que cada persona se hará responsable del coste real de la recogida, tratamiento y reciclaje de sus residuos, en línea con el principio de que ‘quien contamina, paga’.
Una obligación que no ha impedido al exalcalde de Ibiza Rafa Ruiz criticar a los consistorios populares. «Me sabe mal por las familias obreras que fueron engañadas con sus sermones sobre lo mala que es la izquierda que nos cruje a impuestos», apuntó el socialista en X.
Un comentario que fue contestado en la misma red social por el PPde Sant Josep y en declaraciones a Periódico de Ibiza y Formentera por el alcalde josepí, Vicent Roig. «Que el propio partido que ha provocado que tengamos que subir los impuestos con la ley del 2019 que hizo Armengol y luego con la del 2022 que hizo el Estado es, como mínimo, osado», apuntó el alcalde de Sant Josep. «Nos vemos obligados a hacerlo y cuando gobernamos cumplimos las normas y la ley aunque no nos gusten», insistióRoig, «y si no nos gustan las leyes tenemos que intentar cambiarlas. Y al primero que hay que cambiar es al presidente del Gobierno, que está completamente desacreditado por mucho que diga el Partido Socialista».
El equipo de gobierno de Sant Josep no podrá compensar este incremento de la tasa de basuras con una rebaja en algún otro tributo o impuesto municipal «porque los tenemos al mínimo». Vicent Roig asegura que «a la hora de hacer los presupuestos miraremos los ingresos y repercutiremos en mejorar los servicios e incrementar alguno de ellos de cara a los ciudadanos. Si pudiésemos dedicar parte de los remanentes a pagar este servicio y hacer una subida gradual, lo haríamos pero no es el caso, no podemos».
Sant Joan
La alcaldesa de Sant Joan, Tania Marí, también sostiene que este incremento en la tasa de basuras, que en el caso de su municipio todavía está en fase de evaluación, «no es una cuestión de voluntad política de los ayuntamientos, sino del estricto cumplimiento de una norma que nos obliga a cubrir íntegramente el coste del servicio y de la gestión de los residuos con la tasa correspondiente».
Marí avanza que el ajuste de la tasa en Sant Joan no se hará de forma lineal sino que se tendrán en cuenta diferentes parámetros, «como los metros cuadrados de cada propiedad para garantizar que la carga se distribuya de manera proporcional y justa entre todos los contribuyentes». En cuanto a comercios y establecimientos hoteleros, el consistorio ‘joaní’ tendrá en cuenta su tipo de actividad «en atención a los residuos que generan».
En contraprestación al futuro incremento de la tasa de basuras, el equipo de gobierno aprobará una reducción del 3% en el Impuesto sobre Bienes Inmuebles (IBI). «Somos conscientes del impacto que estos ajustes pueden tener y, por eso, queremos compensar esta necesidad con una disminución en otros ámbitos cumpliendo con nuestro compromiso de reducir la presión fiscal», añade Tania Marí.
Desde el Ayuntamiento de Sant Joan afirmaron que entienden «las preocupaciones que puede generar este hecho» y reiteran que su objetivo es «mantener un servicio de calidad en la gestión de los residuos, así como una gestión fiscal justa y transparente», por lo que ofrecerán «toda la información necesaria a los ciudadanos para resolver dudas y aseguraremos que los ajustes se hagan de la manera más equitativa posible».
Sant Antoni
Quien ya ha aprobado la subida de la tasas de basuras para 2025 ha sido el Ayuntamiento de Sant Antoni, que en su caso será de un 35% lineal. Como contrapartida, el pleno también aprobó aplicar una rebaja en el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) para que el año que viene el tipo impositivo pase del 0,70 actual al 0,68, lo que supone una reducción del 2,86%. El alcalde de Sant Antoni, Marcos Serra, recuerda que en la pasada legislatura ya se redujo este impuesto del 0,78 al 0,70 y que su idea «es continuar bajándolo en los próximos años».