La presencia de grandes acumulaciones de algas en Cala Martina, en Santa Eulària, está generando malestar entre los establecimientos de la zona y los bañistas que frecuentan esta playa. A las puertas del verano, algunos negocios advierten de la falta de limpieza y del impacto que esto empieza a tener en la imagen de este sitio.
Desde hace semanas, varios puntos de la zona presentan gran cantidad de alga acumulada en la orilla, especialmente en las zonas donde se instalan hamacas o servicios náuticos. Según explican desde algunos establecimientos, la limpieza se ha hecho solo de forma puntual y cuando se recoge el alga, en ocasiones, se empuja hacia dentro del agua, generando más incomodidad para quienes se bañan.
Los negocios locales apuntan a una falta de mantenimiento que se ha agravado en las últimas semanas. «Los turistas preguntan por qué está así. Se meten al agua y hay zonas donde les llega la alga hasta las rodillas», señalan desde uno de los servicios de la playa.
Foto: N.S.
La limpieza de Cala Martina corresponde a la empresa Valoriza, adjudicataria del contrato de mantenimiento de playas y limpieza viaria en el municipio. Sin embargo, desde algunos negocios critican la falta de eficacia en la retirada de algas.
Por su parte, desde el servicio de velamar señalan que no pueden retirar la posidonia acumulada, ya que se trata de una planta marina protegida. Esto no solo impide su retirada, sino que también les imposibilita ubicar el velamar en su ubicación habitual.
Además, algunos empresarios aseguran que, a pesar de haber abonado fianzas y parte de las concesiones, aún no pueden comenzar a cobrar por los servicios de temporada, lo que complica aún más su actividad.
SanitarioSiempre he defendido Ibiza y su belleza natural, pero quiero llamar la atención sobre la hipocresía y la incompetencia que han convertido a Ibiza en una isla sucia donde los residentes no se enorgullecen de mantenerla limpia y presentable. En cambio, se quejan de los turistas que inyectan enormes cantidades de dinero en la comunidad y constantemente se aprovechan de quienes los alimentan. Al mismo tiempo, hay muchos que parecen no haber viajado nunca y que dicen que Ibiza es solo lujo y otros comentarios estúpidos y estrechos de miras, cuando no tienen ni idea de cómo otros destinos cuidan con orgullo de sus comunidades. Los ibicencos pueden ser su propio peor enemigo.