La constructora Hermanos Parrot se ha hecho con la adjudicación de las obras de remodelación del camí del Calvari en Vila. Promovidas por el Consorci Eivissa Patrimoni de la Humanitat, tienen un presupuesto de 2,5 millones de euros y cuentan con financiación autonómica a través del Impuesto de Turismo Sostenible. El plazo de ejecución de los trabajos es de cinco meses.
El objetivo de esta intervención es «favorecer la movilidad en la zona porque se mejorará otra vía de entrada a Dalt Vila, rodeando la muralla, y se atraerán más residentes de la isla» al histórico barrio de la capital. Con este proyecto, además, «se quieren potenciar y atraer nichos de mercado más sostenibles e interesados en el turismo cultural, ya que es la ruta de acceso al Parador, que abrirá pronto sus puertas», según figura en la memoria justificativa del proyecto.
Entre los puntos más destacados del proyecto se encuentra la creación de un mirador como «punto de interés turístico». El camino tiene una longitud de 450 metros que «invita a crear una zona cómoda de descanso, con sombra, que ofrece una serie de beneficios tanto para la comunidad como para el medio ambiente y que permite relajarse con unas vistas extraordinarias al mar Mediterráneo».
También se prevé en este proyecto la creación de una nueva plaza, «en la confluencia del acceso al Parador, el acceso a los senderos y a los lavabos públicos». Este espacio contará con mobiliario urbano, bancos y aparcabais, arbolado y una plaza de aparcamiento para microbuses. Esta plaza «mejora la estética y funcionalidad del entorno, atrae más actividad turística y se convierte en un espacio atractivo para pasar el tiempo libre». Además, servirá «de puente entre el Parador y los residentes, haciendo que el mismo no sea solo un lugar para los turistas sino un espacio de disfrute para la comunidad local».
Gracias a esta remodelación, por otro lado, se producirá una mejora de las infraestructuras hidráulicas pues «con la nueva red de saneamiento se suprime el depósito de aguas fecales del edificio exento de lavabos públicos existente». Además, con la nueva instalación de la red de pluviales y la renovación de la red de suministro de agua potable se lograrán «beneficios tangibles e intangibles que mejoran la salud, protegen el medio ambiente, promueven el desarrollo económico y social y contribuyen a la sostenibilidad».
La intervención supondrá también una mejora de la iluminación de la zona pues «se proyecta una nueva instalación de alumbrado público, tipo LED, con calificación energética A, de larga vida útil, que provoca una mejora en la eficiencia y en la uniformidad así como en la sensación de seguridad». Esto último, se añade en la memoria, permitirá una «reducción de delitos y accidentes».
El proyecto contempla, finalmente, la plantación de arbolado y la creación de varias zonas verdes cuyo objetivo será «mejorar la calidad del aire, regular la temperatura (reducción del efecto isla de calor y creación de zonas de sombra) y embellecer el área haciéndola más atractiva tanto para los residentes como para los visitantes».
La empresa más desastre de la isla. Pasear por Cala de Bronx , la antigua Cala de Bou , con las baldosa de las aceras bailando. Ma es lo que hay, su parte al política de turno y adelante que están los tontos que pagan impuestos