Pese a las críticas y reproches mutuos, el equipo de gobierno en el Consell d’Eivissa y la oposición consiguieron ayer consensuar una quincena de medidas para afrontar la situación de sequía que vive la isla de Ibiza.
Una de estas propuestas aprobadas, en este caso por unanimidad de todos los grupos, fue la de pedir al Govern una modificación legislativa encaminada a «reducir, regular o, en su caso, prohibir los usos permitidos del agua disponible en Ibiza». Y más concretamente «la prohibición del agua de pozo para el abastecimiento de cruceros y el riego de jardines de alta demanda hídrica no adaptados al clima de Ibiza y a un modelo de gestión sostenible».
El conseller del PSOE Víctor Torres, acusó al PP de haber presentado la moción después de saber que los socialistas la iban a presentar. «Se instan a sí mismos a tomar medidas que no han adoptado en 32 meses de prealerta. Una inacción que nos ha llevado a declarar la alerta de sequía. Dejen de hacer anuncios y póngase a trabajar», señaló el conseller socialista, quien añadió que «el problema es la ausencia de control. Falta más inspección y sanciones y no más anuncios y titulares».
«Aceptaremos muchas de sus aportaciones a nuestras propuestas para salir de aquí con la idea de trabajar de forma conjunta para solucionar la crisis hídrica en Ibiza», apuntó Víctor Torres. Concretamente, el PP aceptó dos transaccionales del PSOE y añadir dos puntos más a su moción, mientras que los socialistas aceptaron seis modificaciones de sus propuestas a petición de los ‘populares’. En total se aprobaron 18 puntos, de los que 14 fueron por unanimidad de todos los grupos del plenario.
Desalación y competencias
Otro de los acuerdos alcanzados en el pleno de ayer solicita al Govern un plan de choque en coordinación con los ayuntamientos de la isla y el Consell que cuente con un presupuesto, planificación y objetivos a corto plazo. Este plan de choque debe contemplar la disponibilidad de agua desalada «con cuantas plantas fijas o móviles sean posibles». Además, también solicitan que se impulsen medidas para fomentar el uso de aguas regeneradas en el ámbito rural en sustitución de las aguas subterráneas.
La propuesta socialista que no ha salido adelante ha sido la de «intensificar las inspecciones sobre los pozos ilegales procediendo a su clausura y a su sanción» ni la de iniciar las gestiones para la transferencia de la competencia en la gestión integral del agua, ya que el PP pedía que se hiciera «de manera progresiva, empezando por los torrentes».
El acuerdo alcanzado en el pleno celebrado ayer también contempla la realización de estudios de viabilidad para la recarga de acuíferos y para el almacenamiento de agua desalada, así como la creación de nuevas balsas de riego que faciliten el aprovechamiento del agua depurada.
El pleno acordó además reforzar los recursos de la Conselleria del Mar y del Ciclo del Agua, trabajar de manera conjunta con los ayuntamientos para extender las inversiones a todo el territorio y garantizar la transparencia mediante la publicación de informes periódicos sobre la situación hídrica.
Por otro lado, el Consell d’Eivissa fomentará la participación de la sociedad civil y del sector primario a través de la Junta Insular del Agua.
El conseller insular de Gestión Ambiental, Ignacio Andrés, subrayó que la situación actual «obliga» a actuar con «determinación» para asegurar el suministro y proteger los acuíferos.
También defendió que la reutilización de agua depurada y la modernización de las infraestructuras son «imprescindibles» y deben realizarse de la mano de los ayuntamientos y sectores implicados.
El objetivo de estas iniciativas es garantizar el abastecimiento de agua a corto plazo y asegurar la sostenibilidad de los acuíferos en el futuro.
El Consell trasladará los acuerdos adoptados a todas las instituciones competentes para que valoren su aplicación y ejecución.
Agua de pozo a los cruceros???? De que pozo? No tienen vergüenza y luego se llenan la boca con la palabra -sostenible-