Las intensas lluvias que caen este martes en Ibiza y Formentera dejan un balance de inundaciones, rescates y un colapso casi total en la movilidad de la isla. En solo 12 horas se registran hasta 236 litros por metro cuadrado en la ciudad de Ibiza, 135 en el aeropuerto, 98 en Formentera, 68 en Sant Joan y 43 en Sant Antoni. Estas cifras llevan a activar primero la alerta naranja, después la roja a mediodía y de nuevo la naranja a partir de las 16.00 horas.
Durante las horas más complicadas, el servicio de Emergencias 112 ha enviado un mensaje a todos los móviles avisando del nivel rojo y pidiendo a la población que evitara cualquier desplazamiento. Aunque la alerta se ha rebajado por la tarde, se mantiene la recomendación de máxima precaución.
El Ayuntamiento de Vila ha informado de una treintena de actuaciones hasta media tarde, con dos heridos graves por caídas y la habilitación del Recinto Ferial como espacio de acogida para personas sin hogar. La Policía Local refuerza su dispositivo con 22 agentes adicionales, alcanzando medio centenar de efectivos.
En educación, esta mañana, la Conselleria balear de Educación ha suspendido las clases por la tarde y ha pedido a las familias que no acudiesen a los centros hasta que la situación mejorase. A las 16.00 horas, cuando ha disminuido la intensidad de la lluvia, los alumnos han podido ser recogidos. En Sant Antoni, se ha desalojado preventivamente el colegio Santísima Trinidad tras inundaciones en la planta baja y desperfectos en la instalación eléctrica.
El director general de Emergencias del Govern, Pablo Gárriz, ha confirmado que no hay daños personales entre la población y subraya la importancia de limitar los desplazamientos. Ha advertido además que algunos accesos al Hospital de Can Misses se han visto comprometidos durante la mañana, aunque ya funcionan con normalidad.
El temporal afecta también al puerto de Ibiza, donde algunos ferrys han tenido dificultades para atracar y se registra un vertido de aguas fecales tras sobrepasarse la estación de bombeo.
Para reforzar la respuesta, la Dirección General de Emergencias ha activado la situación operativa 2 del Plan Inunbal, movilizando a la Unidad Militar de Emergencias desde la Península con helicópteros y material pesado. También se prepara un tercer contingente desde Mallorca, mientras el centro de coordinación de emergencias opera desde el parque de bomberos de Ibiza.
El servicio marítimo de Balearia también se ve afectado. El trayecto Dénia – Ibiza – Palma se retrasa de las 17.00 a las 18.00 horas para facilitar el embarque de efectivos de la UME. La salida Ibiza – Palma de las 20.00 horas pasa a las 21.00, y se habilita una salida especial a las 21.15 desde Palma hacia Ibiza para trasladar personal y equipos de emergencia.
Entre los accesos principales, la carretera E10 ya ha sido reabierta a la circulación. Sin embargo, permanecen cerrados varios túneles, como el del aeropuerto y el de Puig d’en Valls, y se pide a la población evitar desplazamientos innecesarios, tanto a pie como en vehículo.
Emergencias gestiona más de 70 incidentes relacionados con rescates y achique de agua, y las autoridades mantienen la alerta naranja para garantizar la seguridad de todos mientras la lluvia continúa de forma intermitente.
Ahora que tienen a todos los borrachos con paga en el recinto ferial podrían meterlos a todos en un avión a Cataluña, de donde viene la mayoría.