Los soldados de la UME consiguieron ayer acelerar la extracción de agua acumulada en la carretera del aeropuerto gracias a la llegada de madrugada de tres bombas de gran caudal (Embal y Xylem) y que han permitido que el nivel bajara a un muy buen ritmo.
El director general de Emergencias, Pablo Gárriz, calculó que había acumulados unos tres millones de litros de agua en el tramo inundado de la carretera del aeropuerto, el único punto de la red viaria ibicenca afectado aún por el diluvio del martes. Ayer, explicó Gárriz, «se hizo una operación en el último momento: una maniobra de achique de urgencia y conseguimos llegar a los grupos de bombeo, por lo que ahora achicamos con el sistema propio de la instalación».
Sin embargo, y en previsión de que «nuestras medidas no funcionaran», Emergencias gestionó la llegada de tres bombas de gran caudal procedentes de Madrid y Zaragoza que embarcaron a las diez de la noche hacia Ibiza y llegaron a las cinco de la madrugada. «Ahora estamos con la máxima capacidad de extracción de agua», apuntó Gárriz. La bomba Xylem es capaz de bombear 800 m3 por hora (15.000 litros por minuto); y la Embal, entre 200-300 metros la hora (unos 7.000 litros por minuto).
El cierre de este tramo de la carretera del aeropuerto aún provocó ayer grandes atascos en horas punta de circulación. Por este motivo, el Consell d’Eivissa pide a la población que se usen recorridos alternativos para llegar al aeropuerto de Ibiza, como la carretera de Sant Josep (EI-700) o la de Sant Antoni (EI-600). «Nos ha generado una intensidad muy alta de tráfico por el centro de Sant Jordi y nos preocupaba mucho porque afectaba a la logística con el aeropuerto», como la llegada de camiones para surtir de combustibles a los aviones.
Otras actuaciones
La carretera al aeropuerto es uno de los 40 puntos donde actúa este jueves el operativo de emergencias, con efectivos y equipos repartidos por la ciudad de Ibiza y las zonas de Jesús, es Puig d’en Valls y Sant Jordi.
Se han recuperado asimismo, junto con la Agencia Balear del Agua (Abaqua), los sistemas de bombeo del tanque de tormentas del puerto de Ibiza, cuyos transformadores de luz se vieron afectados. «Esto nos permite tener el alcantarillado y las pluviales separadas, además del tanque limpio, por lo que si tuviéramos otro evento (de lluvia), protegeríamos el sistema de saneamiento», explicó ayer Gárriz.
También se han recuperado los motores de la estación de bombeo en la antigua depuradora de Vila y se ha tenido que hacer recircular las aguas sucias para no «destrozar los sistemas de filtrado de la depuradora».
Se han liberado por los emisarios con «un grado de filtración óptimo, sin residuos sólidos», ha señalado el director de Emergencias.
Com es de preveure quan plou, la riera de l'aeorport s'omple. Si no haguessin fet aquesta macrobarbaritat, ara no tindríem aquest megaproblemes.