Vicent Marí, presidente del Consell de Ibiza, ha dado un baño de realidad a la oposición, formada por socialistas y EU, al responder al PSOE con contundencia sobre la llegada de inmigrantes ilegales en patera, un fenómeno que lejos de reducirse va cada vez a más. De hecho, a día de hoy ya se rozan los 3.000 inmigrantes llegados en pateras a las Pitiusas, según las cifras que aporta puntualmente la Delegación del Gobierno de Baleares cuando se producen nuevas llegadas.
«No debemos ser ingenuos. Esto es la puerta de entrada de la inmigración ilegal a Europa. No es casualidad ni llegan unos pocos; están llegando muchos y cada vez más. Por tanto, hay que frenar esta avalancha y la inmigración, sí, pero regulada y legal y por los cauces que tocan», expresó Vicent Marí, quien reiteró que los servicios de acogida del Consell están al máximo y que no se puede «acoger a todo el mundo porque no tenemos capacidad; esto no es una cuestión de solidaridad sino de capacidad, pues nuestro sistema no está preparado para esto».
Vicent Marí recordó que la presidenta del Govern, Marga Prohens, él y los presidentes de los Consells de Mallorca y Menorca se reunieron con el comisario europeo de Inmigración para «exponerle la situación que estamos viviendo porque al Gobierno central no le importa lo que estamos viviendo». En este sentido, recordó que toda Baleares ha reclamado que actúe Frontex «y el comisario europeo nos dijo que Gobierno debe pedir que Frontex actúe y allí donde actúa se reduce la inmigración ilegal un 95%. Ya es hora que nos pongamos las pilas».
«La situación es cada vez más grave. Una política de fronteras seria no puede permitir estas situaciones; no sabemos a quién viene y a qué viene y preservar ala seguridad de las fronteras y de la población que vive es importante, empecemos ya a hablar claro», afirmó.
Vicent Marí señaló que «aplaude» que el ministro Marlaska «vaya a Argelia y que le hayan pedido la repatriación de estos siete, pero son 77. Hay que enviar un mensaje claro de quien venga ilegalmente será retornado a su país, que es lo que toca porque no hay refugiados políticos, no hay víctimas de guerra ni nada de esto. Es diplomacia, actuar en origen, poner medidas como Frontex, no ponerse de perfil y que venga quien quiera cuando quiera», concluyó.
Una cosa es no tener competencias, como es el caso, y otra empeñarse en mostrarse claramente incompetentes, como también están haciendo.