«El ánimo de lesionar en el acusado ha quedado suficientemente acreditado vistas las lesiones sufridas por (...), que si bien algunas pudieron ser producidas al defenderse éste, ello da a entender cuál era el ánimo del acusado, en especial en las heridas producidas por arma blanca».
Esta es una de las principales razones por las que la Audiencia Provincial ha condenado a seis meses de cárcel a Mujdat Akkum, el diseñador de moda turco que fue detenido en mayo del año pasado después de sufrir una pelea con un joven en su casa de la zona de Talamanca, reyerta en la que se emplearon unas tijeras. El acusado, además, tendrá que pagar medio millón de pesetas por las lesiones causadas y otras 200.000 por las secuelas.
El tribunal, precisamente en este punto, resalta que es imposible conocer quién fue el primero que cogió las tijeras para utilizarlas al iniciarse la discusión, pero aclara que ambos las tuvieron entre sus manos. Por esta razón, no acepta la agravante que pedía la acusación particular por uso de instrumento peligroso, solicitud en la que se sustentaba la pena reclamada de tres años de prisión. La Sala, apoyándose en los testimonios recabados en la vista y especialmente en el informe forense, considera sin embargo plenamente probado que el diseñador turco fue el causante de la pelea tras abalanzarse al menos por dos ocasiones con «ánimo libidinoso» y quitarle la camiseta al joven invitado.
A la vez reconoce que durante la pelea se intercambiaron entre ambos golpes de ataque y defensa y que las últimas fueron mayores en los dos implicados.