El que fuera responsable de la oficina de correos de Sant Francesc Xavier entre 1996 y 1997 se defendió ayer ante un jurado popular de una acusación de malversación, delito por el que el fiscal y el abogado del Estado piden una condena de tres años de cárcel y seis años de inhabilitación. El jurado se reunió en la Audiencia Provincial de Palma para decidir sobre este caso cuya vista ha sido fijada para dos días. Pese a que las acusaciones le responsabilizan de la desaparición de 1.385.095 pesetas, el acusado, Enrique S.M., niega que se quedara con este dinero. Sin embargo, seis días después de descubrirse los hechos devolvió esta cantidad.
El acusado fue nombrado jefe accidental de esta oficina en agosto de 1996. Al año siguiente la Inspección de Correos realizó una auditoría por sorpresa, descubriéndose en ese momento que faltaba dinero, en la gestión de los reembolsos y en los ingresos por la venta de sellos. El funcionario indicó ayer al jurado que antes de que se hiciera la inspección él ya descubrió la irregularidad.
Indicó que intentó averiguar lo que había ocurrido y sospechó que alguien de su oficina pudo pagar dos veces un reembolso, y de esta forma se justificaría que faltara este dinero. Habló con sus compañeros y no logró descubrir nada. Aunque no era el jefe oficial, se consideró responsable de lo que había ocurrido y se mostró dispuesto a pagar el dinero que faltaba de su propio bolsillo, según explicó el acusado durante la sesión de ayer al jurado que se ha reunido para decidir sobre los cargos que se le imputan.