El Tribunal Constitucional ha paralizado la entrega a Italia del presunto «capo» de la mafia Giovannello Greco, que reside en Mallorca y que está condenado en Italia a 30 años de prisión, al entender que la Justicia española vulneró indirectamente su derecho a defenderse en un proceso con todas las garantías.
El Constitucional ha anulado parcialmente dos autos de la Audiencia Nacional que declaraban procedente de manera incondicionada. Greco, nacido en Palermo, fue detenido por primera vez en España en Santa Gertrudis en 1997 (trabajaba como pescador en Sant Antoni, donde se le conocía como Domingo) y en 1999 en Mallorca. Italia pidió su extradición tanto por hechos que estaban siendo enjuiciados como por otros ya juzgados y sentenciados. Los que estaban siendo enjuiciados se referían a hechos en los que intervenían otros sujetos sobre presuntos delitos de asesinato y tenencia de armas mientras que los ya sentenciados eran cuatro causas en las que Greco fue condenado por uso de armas de fuego, dos delitos de receptación, pertenencia a asociación de tipo mafioso, tentativa de homicidio y tenencia ilegal de armas.
Greco alegó en su recurso ante el TC que se había lesionado su derecho a un proceso con todas las garantías porque la Audiencia Nacional había accedido a la extradición para ser enjuiciado en Italia por unos hechos respecto de los cuales los tribunales de ese país habían decidido previamente su «separación» para que fuesen llevados a cabo con independencia de los demás implicados, por lo que consideraba perjudicada su situación procesal. A este respecto, el Constitucional señala que se trata de un «simple temor» a que el tribunal que vaya a enjuiciarle pueda haberse formado un prejuicio, por lo que no se trata de una lesión actual sino una vulneración no producida todavía.