Francisco Javier G., natural de Portillo (Valladolid), fue detenido ayer sobre las 10.30 horas de la mañana en Santa Eulària después de haber sido sorprendido en un piso que no era de su propiedad y en el que presuntamente quería robar. Varios vecinos le acorralaron y le retuvieron hasta que llegó la Policía Local.
Al parecer, el joven pasó la noche en un piso desocupado encima de un restaurante ubicado en la calle principal de la localidad. El día anterior, la propietaria del inmueble, que también posee unos pisos en el mismo edificio, creyó ver luz en uno de ellos. Cuando entró para verificar si había alguien, la dueña descubrió que alguien había roto una ventana, pero después de mirar bien todo el piso se fue sin darle mayor importancia. Fue a primera hora de ayer, cuando la mujer de la limpieza vio un hombre en la terraza de uno de los pisos. Cuando avisó a la dueña, ésta decidió subir acompañada de un empleado del bar para evitar que el desconocido se llevase nada o causase algún destrozo.
A la vez, llamó a la Policía Local de Santa Eulària. El sospechoso, viéndose descubierto, emprendió la huida perseguido por dos empleados del bar. Después de una larga persecución, y tras intentar esconderse, el hombre fue finalmente rodeado en el puerto deportivo, frente a un conocido restaurante de la zona. Minutos más tarde llegó la Policía Local y practicó la detención. El supuesto ladrón pasó la noche en un edificio en obras colindante, esperando el momento indicado para entrar en la casa; pero gracias a la rápida intervención de la dueña y los empleados, el sospechoso no tuvo tiempo de llevarse nada