La familia de Jeffrey Derek Hodgson cumple hoy diez días en vilo sin tener aún ni una sola noticia que haya permitido conocer el paradero posible de este británico de 39 años de edad, con problemas de epilepsia y deficiente mental, desaparecido en la entrada del Hotel Club Playa Imperial de Cala Llonga cuando él y su familia iban a empezar sus vacaciones en la isla.
Hoy está previsto que se unan a las tareas de búsqueda, que se están levando a cabo desde el pasado día 9, un equipo de rastreo con perros especializado en la localización de personas desaparecidas. Dicho equipo cuenta con una amplia experiencia en este tipo de misiones y ha participado, entre otras intervenciones, activamente en zonas catastróficas como es el caso de las zonas castigadas por el terremoto que asoló Turquía, según informaron fuentes del consulado británico.
Hasta la fecha, además del esfuerzo de voluntarios, del Ejército, y de las patrullas policiales y de Guardia Civil se han efectuado amplios peinados en Santa Eulària. Entre ellos, figuran los realizados desde el aire por un helicóptero de la Guardia Civil y por otro de una empresa privada que se ha brindado para colaborar desinteresadamente en los rastreos.