Los dos hombres que robaron y propinaron a un ciudadano suizo una brutal paliza en su casa de Buscastell trabajaban para la víctima, al parecer, debido a una deuda que tenían contraida con el mismo. Este es uno de los datos que se ha podido recabar en la investigación que está llevando a cabo la unidad de Policía Judicial de la Guardia Civil de Eivissa y que, hasta el momento, se ha concretado en la detención y posterior ingreso en prisión de uno de los dos implicados en el suceso, un súbdito ecuatoriano, mientras prosiguen las pesquisas para dar con el paradero de la segunda persona incriminada, de igual nacionalidad y de la que los investigadores poseen una descripción.
Según ha podido saber este periódico, los dos individuos realizaban trabajos de obra en el jardín de la víctima para pagar una deuda, por lo que tenían un fácil acceso a la vivienda. La investigación parece establecer que el robo fue planeado tras reclamar los dos sospechosos que se les pagara más por dicho trabajo, algo a lo que el agredido se negó.
Ante esta situación, los dos ecuatorianos decidieron cometer el robo y, para ello, penetraron en la casa situada en Buscastell y maniataron a su inquilino en una silla. Pero los hechos parecieron precipitarse, puesto que además del robo, en el que los delincuentes obtuvieron un botín cercano al millón de pesetas, le fue propinada una violenta paliza al súbdito suizo con un objeto contundente, probablemente con una barra de las que se usan en los baños como soporte para las toallas. Los golpes fueron dirigidos, sobre todo, a la cabeza de la víctima, que quedó semiinconsciente y desangrándose aún atado a la silla. Los agresores se hicieron con el dinero y aún está por establecerse si, además, robaron del domicilio algún objeto o efecto de valor.
La víctima fue hallada por unos amigos, quienes se desplazaron hasta Buscastell y le encontraron golpeado brutalmente. Estos amigos avisaron con urgencia a la policía y a una ambulancia. Debido a las graves heridas sufridas en la zona craneal, el ciudadano suizo tuvo que ser evacuado inmediatamente a la Policlínica Nuestra Señora del Rosario para ser intervenido quirúrgicamente.