El temporal que ayer continuaba azotando las Pitiüses, uno de los peores registrados en los últimos años pese a que ayer amainaron sustancialmente los vientos, mantuvo incomunicadas las islas por vía marítima, tanto las conexiones entre las mismas como con la península. La única excepción fueron los dos viajes de ida y vuelta entre Eivissa y Formentera realizados por sendos rápidos a las 07'30 y a las 13'30 horas de ayer, aunque el mal estado del mar en la zona de es Freus desaconsejó que se repitieran a lo largo de la jornada.
En el caso de las conexiones con la península, tanto Baleària como Trasmediterránea anularon todos sus viajes previstos para ayer, tanto en el puerto de Eivissa como en el de Sant Antoni, y se encuentran a la espera de la evolución del tiempo durante el día de hoy para decidir si pueden restablecerse dichas líneas marítimas. Las previsiones del Instituto Nacional de Meteorología fijaban vientos de fuerza 4 y 5 tanto al este como al oeste de las Pitiüses, con un intenso oleaje y aguaceros.
Las costas de Eivissa y Formentera sufrieron los duros envites del viento durante toda la noche de ayer, provocando daños en embarcaciones, carreteras, playas, etc. En Formentera, las zonas de es Caló y es Pujols estuvieron entre las más castigadas. En ambos lugares, un gran número de casetas varadero sufrieron daños de consideración. En es Caló desaparecieron tres embarcaciones, mientras una cuarta quedó destrozada al golpear repetidamente contra las rocas. En es Racó d'es Pujols otro llaüt compartió el mismo destino. En s'Estany d'es Peix quedaron semidestrozadas las casetas varadero restauradas por Costas y varias barcas se hundieron.
La fuerza del viento y la violencia de las olas causaron daños en la carretera de Port d'es Torrent. Uno de los tramos quedó casi impracticable al quedar cubierto de rocas, tierra y ramas arrojadas por el mar sobre ella. En Cala Llonga, la playa prácticamente despareció arrastrada por el agua.
Once mil llamadas al 112 en Balears
El Centro Autonómico de Emergencias 112 reunió ayer al equipo de
crisis que dirige de manera consensuada las actuaciones de todos
los servicios de seguridad y asistencia. Esta entidad registró
entre el sábado y ayer más de 11.000 llamadas en el ámbito balear y
tuvo conocimiento de unos 1.720 incidentes. De estos, en Eivissa
fueron atendidos 142 en las Pitiüses hasta las seis de la tarde de
ayer, según los datos del 112. El conseller balear de Interior,
Josep Maria Costa, rogó a la población que tenga «paciencia»
mientras se restablecen las comunicaciones y el suministro de
energía.