Eivissa no sólo centra la atención de los medios por sus playas, sus discotecas o su Patrimonio de la Humanidad. Ayer, y tras la muerte de dos jóvenes tras ingerir éxtasis en una fiesta en Málaga, la prensa se apresuró a indagar sobre el consumo de esta sustancia en España y fueron muchos los que coincidieron en señalar la isla como uno de los principales puntos de consumo y distribución de esta sustancia estupefaciente. De este modo, el «Diario Vasco» publicaba en su edición de ayer la existencia de lo que el Plan Nacional Sobre Drogas (PNSD) considera como 'zonas calientes' y en las que sitúa el oriente andaluz, la Costa del Sol, Cádiz y Huelva. «Los tentáculos de esta peligrosa ruta se enseñorean también de Ibiza y del Levante español», publica el rotativo.
En el «Diario Montañés» se menciona de nuevo el libro del PNSD «Drogas de síntesis en España» para asegurar que «en relación al tema de las zonas calientes se define a Ibiza como el lugar donde se han comunicado muy 'diversos grupos de neófitos y divulgadores de nuevas modas y las nuevas sustancias'. Otros medios de comunicación se han referido a las incautaciones de grandes números de dosis de éxtasis en la isla y a la aparición en Eivissa de algunos derivados del MDMA, principal compuesto activo del éxtasis. La muerte de los dos jóvenes se produjo durante la noche del pasado sábado en una fiesta a la que asistieron más de 14.000 personas, celebrada en el pabellón de deportes José María Martín Carpena de Málaga.
Los primeros resultados de la autopsia realizada a una de las víctimas, José Joaquín Barragán, de 20 años, establecen que murió como consecuencia de un fallo multiorgánico provocado casi con toda certeza por el consumo de derivados anfetamínicos. El joven, que estuvo cuarenta horas seguidas en la UCI del hospital Clínico Universitario de Málaga antes de morir, tenía dañados numerosos órganos internos, que se analizarán por separado, y especialmente los riñones. El Instituto Nacional de Toxicología cuenta, además, con algunas pastillas de éxtasis entregada por los amigos de las víctima para que éstas sean también analizadas.
Ante lo ocurrido, la Guardia Civil ha anunciado que establecerá «estrictos» controles contra el tráfico de drogas en la fiesta dance que se celebrará el próximo sábado en una sala de Granada, celebración a la que asistentes de la fiesta de Málaga están convocando a través del canal de chat «Pastilleros».