Una guerra de cifras y estadísticas parece enfrentar al Govern balear y al Cuerpo Nacional de Policía respecto al aumento o disminución de la criminalidad en Balears. Según el conseller balear d'Interior, Josep Maria Costa, actualmente ha aumentado la inseguridad y la delincuencia en las Islas y, en consecuencia, solicita al Gobierno un aumento de la dotación de efectivos policiales para la Comunitat Autònoma. Costa ofreció estos datos ayer en el Consell Insular, lugar en el que afirmó que «suele haber un diez por ciento de plazas policiales dotadas para Balears no cubiertas, una cifra que puede llegar a ser de un 15 o un 20 por ciento». Según el responsable de Interior, serían necesarios entre 200 y 300 policías más para cubrir dichas necesidades.
Pero Costa quiso aprovechar su intervención para destacar el desajuste existente entre las cifras de criminalidad ofrecidas por Juan Cotino, director general del Cuerpo Nacional de Policía, y las extraidas de las estadísticas del Ministerio del Interior. Según Cotino, Balears ha visto como la delincuencia ha disminuido, un hecho que Costa atribuye a que las estadísticas manejadas por la Policía Nacional se refieren únicamente a aquellos núcleos que cuenta con este cuerpo de seguridad, es decir, Palma, Manacor, Eivissa, Maó i Ciutadella. Por el contrario, la tasa de criminalidad presentada ayer por Costa, referida al número de infracciones por cada mil habitantes registradas por Policía Nacional, Guardia Civil, Ertzantza y Mossos d'Esquadra muestra un aumento a nivel nacional de un 4'9 por ciento. Esa misma estadística indica que el aumento en Balears se sitúa en un 23'4 por ciento, cifra sólo superada por Ceuta y Melilla.
Sobre estos datos, recogidos del Ministerio del Interior, Costa señaló que «Cotino parece hablar de otra cosa cuando asegura que la criminalidad ha descendido y habrá que ver a quién debemos creer». Recuperando su argumentación acerca de la reclamación de más efectivos policiales para Eivissa y Formentera, Costa criticó severamente a aquellos alcaldes que, tras reclamar públicamente dichos aumentos, no aprovecharon la presencia de responsables del Gobierno en Eivissa durante el encuentro policial de esta semana para hacer oir sus quejas. «Hay quien prefirió no estar del lado de los ciudadanos y su seguridad y prefirió situarse a la sombra de un subdirector general llegado desde Madrid», dijo Costa. «La talla política se demuestra -continuó- estando al lado del ciudadano».