La gran mancha de fuel originada por el petrolero «Prestige» en el momento de su hundimiento se ha acercado a la costa gallega en las últimas horas y ayer se encontraba a 55 millas al suroeste de Finisterre, según informó en conferencia de prensa el vicepresidente primero del Gobierno, Mariano Rajoy. Rajoy, que compareció junto con el delegado del Gobierno en Galicia, Arsenio Fernández de Mesa, y el conselleiro de Medio Ambiente de la Xunta, Carlos del Alamo, dijo que la mayor bolsa de vertido, que ayer se encontraba a unas 80 millas de la costa, se ha dividido en otras manchas más pequeñas y que, de momento, no se ha detectado que el fuel haya llegado a Corcubión ni a las islas Sisargas.
El ministro se refirió a otra mancha que se encuentra en la zona del hundimiento que, según dijo, es de «menor importancia», al asegurar que son restos de combustible del propio barco y aceites, por lo que descartó que se tratase de fuel procedente de la carga. Rajoy aseguró que el acuerdo bilateral entre España y Francia para controlar el tránsito de buques peligrosos por sus costas se ha puesto en marcha «hoy -por ayer- mismo», e informó de que la fragata «Andalucía» se hallaba en el dispositivo de control de Finisterre desde la mañana para hacer cumplir este pacto.
A juicio del vicepresidente del Gobierno, este acuerdo «tiene una labor pedagógica» ya que transmitirá a la ciudadanía que no pasarán cerca de las costas más buques como el «Prestige» y, en cuanto a la previsión de que llegará un petrolero similar procedente de Letonia, afirmó que «se está comprobando» aunque, en cualquier caso, destacó que «se va a actuar» si se demuestra que es peligroso. En cuanto a la posibilidad de que los restos del «Prestige» que están hundidos viertan más fuel, Rajoy afirmó que según informes técnicos «mantenemos que se va a solidificar» y apuntó que los datos que apoyan estas manifestaciones «son los que ofrecen los Gobiernos español y francés».