Al menos dos personas han muerto y doce han resultado heridas de diversa consideración en el descarrilamiento del tren Talgo Madrid-Cartagena que tuvo lugar ayer tarde a la salida del apeadero de la localidad albaceteña de Tobarra. En el lugar del siniestro, según las fuentes, trabajaban efectivos de la Guardia Civil, bomberos y se desplazaron cinco ambulancias, algunas de ellas procedentes del Centro de Coordinación de Emergencias de Murcia, para trabajar en las tareas de rescate de los heridos que han quedado atrapados en el interior del vagón descarrilado.
El tren salió de Madrid con destino a Cartagena y la locomotora, el primer vagón de viajeros y el furgón que separa a ambos descarrilaron cuando se acercaban al apeadero de Tobarra, mientras que el resto de convoy quedó en las vías. Un viajero del tren declaró a Efe que en el momento del accidente sintió un «golpe fuerte» y que la locomotora y los dos primeros vagones del convoy eran un «amasijo de hierros».
Señaló que tras el siniestro se sucedieron escenas de pánico y varias personas tuvieron que ser atendidas por ataques de nervios. «En el momento del accidente sentí un golpe fuerte de algún objeto que se me cayó sobre la cabeza, aunque el vagón en que iba no volcó», manifestó el pasajero. Las inmediaciones del tren descarrilado estaban «repletas de cristales rotos» y otros pasajeros vieron que «la máquina, un furgón y el primer vagón eran un amasijo de hierros».