Una mujer de 70 años fue apaleada salvajemente, atada de pies y manos y luego encerrada en la despensa de su casa de Pollença por una pareja que le había alquilado un piso de su propiedad y que desvalijó la vivienda mientras ella se encontraba incapacitada.
Según informó ayer el portavoz de la Oficina Periférica de Comunicación (OPC), la víctima fue asaltada en la madrugada del día 25, cuando dormía en un primer piso. La planta baja la había alquilado a Valentín T.I., de 27 años, y la cubana Livia C.B., de 32, que sigilosamente se introdujeron en su casa y la despertaron con violencia. Su intención inequívoca era arramblar con todo lo que encontraran y antes de que la señora pudiera reaccionar le propinaron una paliza y a continuación la ataron de pies y manos. Cuando estuvo inmovilizada la arrastraron hasta la cocina y la encerraron en la despensa. Ya con el camino expedito, procedieron a registrar concienzudamente la casa, en busca de dinero joyas u objetos de valor. Para huir utilizaron el coche de la víctima, que estaba aparcado en el garaje, y minutos después la señora pudo alertar a sus vecinos con sus gritos desesperados.
Cuando fue liberada de las ataduras explicó, en un estado casi de 'schock', lo que había ocurrido y los vecinos se pusieron en contacto urgente con la Guardia Civil. Una patrulla se desplazó hasta la casa de Pollença y se interesó por el modelo de coche de la señora, ya que se estaba desplegando un operativo en las carreteras para dar con él. Al final, el turismo fue interceptado en la rotonda de Campanet y sus dos ocupantes pudieron ser reducidos. En su poder se encontraron las joyas y el dinero de la mujer apaleada, así como otros efectos de su propiedad. Valentín y Livia han ingresado en prisión acusados de los delitos de allanamiento de morada, detención ilegal, robo con violencia y con fuerza y sustracción de vehículo a motor.