EFE-BERLIN
El segundo secuestro de un autobús que se registra en Alemania en dos semanas terminó sin violencia, cuando el menor armado, un libanés de 17 años, que tomó en su poder uno de esos vehículos en Bremen se entregó a la policía después de casi siete horas en las que recorrió 150 kilómetros y retuvo a 16 rehenes. Los rehenes, que fueron liberados por grupos en tres etapas, lo habían descrito como un turco de unos 25 años. Lo que pretendía el secuestrador, al parecer, era la liberación depresos islamistas e incluso había manifestado su decisión de ir a Israel para combatir, intenciones que incluso dejó escritas en cartas.
Hace exactamente dos semanas, un ex convicto secuestró un autobús de dos pisos en Berlín después de haber atracado un banco junto con otro hombre.