G.R,
La camarera que días atrás denunció haber sido víctima de una
agresión sexual por un cliente alojado en un establecimiento
hotelero de Formentera sufrió un accidente de tráfico como
consecuencia del estado de nervios que padeció al toparse de nuevo
con el presunto abusador, libre tras comparecer ante el juez. Todo
ocurrió después de que la Guardia Civil pusiera a disposición
judicial a Alberto C., el turista italiano de 35 años que fue
denunciado por la mujer después de que ésta fuera supuestamente
abordada en una habitación mientras trabajaba.
Según la información recogida por este periódico, el juzgado tomó como medida cautelar, mientras continuaba la investigación judicial, que el acusado pagara una fianza para garantizar económicamente las responsabilidades que se pudieran derivarse del hecho que se le imputa. Alberto C., tras regresar a Formentera, volvió a alojarse en el mismo establecimiento turístico donde tenía previsto permanecer hasta este martes. Según las mismas fuentes, la dirección de este hotel consideró oportuno destinar a la empleada afectada a otra planta para evitar que se produjera el encuentro con el cliente. Ello, sin embargo, se produjo provocando un estado de gran nerviosismo en la empleada. El accidente de circulación que sufrió con su vehículo a continuación, pese a lo aparatoso, no revistió lesiones graves para la mujer.
Ésta aseguró en su denuncia que se había visto sorprendida por el sospechoso cuando adecentaba la habitación. Esta misma persona, que la había estado antes acosando, supuestamente terminó arrojándose sobre ella, momento en que logró huir y pedir ayuda.