El conseller de Justicia y Administraciones Públicas de la Generalitat, Víctor Campos, lanzó ayer, tras los dos pequeños terremotos registrados al este de Valencia, un mensaje de tranquilidad a la población, aunque señaló que los técnicos no descartan que se puedan producir réplicas en las próximas horas. El teléfono de emergencias de la Generalitat recibió ayer tras los dos terremotos cerca de 3.000 llamadas de personas asustadas. Ninguno de los dos sismos se sintieron en Eivissa.
Campos hizo estas declaraciones tras una reunión que mantuvo el presidente de la Generalitat, Francisco Camps, el delegado del Gobierno en la Comunidad Valenciana, Juan Cotino, la alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, y responsables la Dirección General de Interior, el Consorcio de Bomberos y Protección Civil, para analizar la información respecto a los terremotos de ayer. El conseller, quien destacó la ausencia de incidentes provocados por los seísmos, informó de que se ha puesto en marcha el protocolo de procedimiento de actuaciones ante movimientos sísmicos que tiene la Comunidad Valenciana desde el año 1998.
Según los técnicos consultados del Instituto Geográfico Nacional y de la Comunidad -el profesor de la Universidad de Alicante Javier Caturla-, «no tiene que existir ninguna situación de alarma y, en el caso de que se puedan producir réplicas de los movimientos sísmicos en las próximas horas, el nivel de intensidad no superaría los de hoy», indicó. Campos recordó que el último episodio con movimientos similares a los terremotos de ayer y la semana pasada se produjo en 1961 y afirmó que la Comunidad Valenciana es una zona de «cierto riesgo sísmico».