El británico Christopher David P., de 36 años, vecino de Cala Llonga y supuesto director de una empresa que representa los intereses comerciales de una firma de bebidas energéticas, fue localizado en la isla por agentes de la unidad de Policía Judicial de la Guardia Civil de Eivissa después de que una empresa de alquiler de coches buscara a dicha persona desde hace casi nueve meses.
El acusado, en concreto, está acusado de quedarse con seis coches, uno de ellos un BMW de alta gama, sin pagar un euro después que contratara el pasado mes de septiembre un acuerdo de leasing con una empresa de Madrid. Christopher David P., quien aseguró en el juzgado que todo era un lamentable error derivado de una fallo de la sociedad que precisamente dirigía, quedó en libertad con cargos acusado de un delito de apropiación indebida que, en principio, se estima a un valor próximo a los 30.000 euros.
Dicha cantidad corresponde al dinero que el sospechoso supuestamente debía haber entregado por la contratación de los servicios de uso de los vehículos durante el plazo de un año.
Todos los vehículos arrendados, sin embargo, están valorados por una cantidad que en su conjunto supera los 100.000 euros. Uno de ellos, un BMW descapotable, tiene un precio próximo a los 30.000 euros. Los otros son modelos 'Micra', también arrendados por la misma sociedad afectada.