Sin ver a su hija desde hace 16 días y con la custodia y patria potestad retirada judicialmente sin supuestamente derecho a defensa. Así se encuentra una vecina de Puig d'en Valls que ayer decidió manifestarse en la puerta de los juzgados de Eivissa después de que en un «mal momento y un calentón de boca» hayan desembocado en un rocambolesco «bloqueo» judicial que impide atender su solicitud para que pueda recuperar a su hija, una niña de tres años.
Hasta tres juzgados se han visto complicados en un asunto que se inició cuando Esther -nombre real de esta mujer- fue a denunciar lo que consideró el «rapto» de su hija por parte de la familia de su marido. Fue entonces cuando se le comunicó que debía acudir a un juicio de faltas por amenazas y que, lejos de producirse un secuestro, el juzgado, a instancias del fiscal, le había retirado la custodia y la patria potestad de la niña.
La situación se hizo aún más complicada y kafkiana al confluir la imposibilidad de localizar al fiscal que llevaba el caso y la decisión de un juzgado de Primera Instancia de plantear una cuestión de competencia por si pudiera corresponder el caso al juzgado de violencia doméstica.
Ante la parálisis judicial en la que se encuentran ambos procesos, la madre, que desde hace 16 días no sabe nada de su hija ya que la familia de su ex marido no se pone al teléfono, ha decidido tomar la drástica solución de manifestarse.