Los sistemas de seguridad del establecimiento no dejaron lugar a dudas. Como tampoco las tuvo el propietario de la óptica «La Mar» de Santa Eulària cuando observó el pasado 14 de febrero los tejemanejes de una pareja que entró en su tienda. Tras avisar a la Guardia Civil, los agentes pudieron detener a los sospechosos en un tiempo récord desde que se produjo el robo: 40 minutos.
Ambos fueron sorprendidos en la parada del autobús de Santa Eulària cuando dentro de un autocar se disponían a las 13.40 horas a abandonar esta localidad.
El arresto de ambos acusados, Julián B.H. y Rocío H.G., ambos afincados en Madrid, tuvo lugar después de que los agentes visionaran la cinta y montaran un dispositivo de búsqueda. Según el comerciante afectado, los ladrones se había apoderado de gafas de marca cuyo importe en un su conjunto alcanzaban los 2.083 euros.
La responsable del juzgado de lo Penal número 2 de Eivissa, Martina Rodríguez, ha impuesto una condena de seis meses por hurto a los dos acusados. Todo ello pese a que la mujer decidió cargar en el juicio con toda la culpa y exoneró de cualquier responsabilidad a su compañero, algo que, al parecer, no hicieron las imágenes del vídeo de seguridad.