C.CUEVAS
Todos los bomberos que en su día presentaron una denuncia formal contra el coordinador de Emergencias de Eivissa, Pablo Gárriz, «por usurpación de cargo público con consecuencia para la población civil», y contra el director general de Emergencias del Govern balear, Joan Pol Pujol, «por ser el responsable de las acciones de Pablo Gárriz», ratificaron ayer su acusación en el juzgado de Instrucción número 2 de Eivissa.
En este «trámite administrativo», según lo definió el delegado sindical de USO en el Consell y representante de los bomberos, Rufino Díaz-García, los miembros del Parque Insular también ratificaron a la abogada del sindicato, Isabel Navas, como letrada de esta causa y nombraron una procuradora.
La denuncia de los bomberos vino motivada por la gestión por parte de Pablo Gárriz del salvamento de una joven madrileña a finales del pasado mes de septiembre en la zona de sa Pedrera de Cala d'Hort en el que se tardó 13 horas en rescatar a la víctima. Esta evacuación fue sometida a una investigación para aclarar lo sucedido por parte del Govern, quien envió una carta a la joven afectada en la que se exculpaba de las trece horas que tardaron en rescatarla y en la que explicaban que Salvamento Marítimo tomó el mando de su evacuación después de que así lo valoraran los propios afectados, es decir, la víctima. En la misiva se enumeraban hasta ocho circunstancias diferentes que, según el Govern, confluyeron para que la evacuación de la joven se tornara tan complicada.
El Grupo de Rescate Vertical, formado por bomberos y personal sanitario, que durante aquel rescate estaba inoperativo, realizó el mes de noviembre un simulacro de rescate, que no llegó a las tres horas, en la misma zona para demostrar que la evacuación se habría podido realizar en menos tiempo.