J.M.ALONSO
En los dos últimos días la Guardia Civil y la Policía ha detenido a tres hombres por presuntos malos tratos en el ámbito familiar. En los tres casos se trata de hombres que agredieron a sus esposas. J.M.C., boliviano de 53 años, aceptó la pena de seis meses de prisión que solicitó para él el Ministerio Fiscal, aunque no ingresará en prisión porque carece de antecedentes penales, informaron ayer fuentes judiciales.
El condenado reconoció pues los hechos: asestó un manotazo a su mujer en el puesto de trabajo de ésta, en el municipio de Sant Antoni. Al parecer el detonante fueron los celos, puesto que ella no había acudido la noche anterior al domicilio familiar. Tras la agresión, la mujer le denunció, pero el acusado, de motu propio, ya se había presentado en el cuartelillo de la Guardia Civil. Además de los seis meses, J.M.C. no podrá acercarse ni comunicarse con su pareja durante un año.
También fue detenido por el mismo delito el marroquí M.B.K., en este caso por agentes del Cuerpo Nacional de Policía. Está acusado de golpear con el puño en la cara a su esposa, de su misma nacionalidad. Ocurrió, supuestamente, en el domicilio familiar. Ella salió a la calle para llamar por teléfono a la policía y denunciar lo ocurrido. Él la siguió e intentó impedírselo. Una vez que el asunto llegó al juzgado de guardia la mujer decidió retirar la denuncia, aunque el Ministerio Público ha decidido actuar de oficio. Varios agentes se trasladaron al domicilio de la pareja, en el municipio de Vila, y allí el acusado se enfrentó a uno de ellos, por lo que también está acusado de resistencia .
El tercer detenido es el italiano F.B., a quien la fiscal pide nueve meses por causar diversos hematomas a su compañera. Un vecino fue testigo y, según la denuncia, fue amenazado de muerte con un gesto por el detenido, que se enfrenta a nueve meses por el maltrato y a seis más por las amenazas.