La titular del juzgado de lo Penal número 1 de Eivissa, la magistrada Clara Ramírez de Arellano, ha dictado una sentencia absolutoria en el caso de una mujer que fue juzgada meses atrás como sospechosa de haber amenazado de muerte a otros persona en la misma puerta de los juzgados después de que todos los implicados hubieran coincidido en un juicio. El acompañante de la acusada fue denunciado por supuestamente decirle al afectado de que le iba a destrozar su vehículo. A ello siguieron otras amenazas en las que el denunciante aseguró que la mujer le dijo que se anduviera con cuidado porque le iba a cortar el cuello.
Dichos extremos no pudieron ser confirmados por ningún testigo. La discusión acabó tras la intervención de un vigilante de seguridad de los juzgados.