Una residente alemana del municipio de Santa Eulària que, en septiembre de 2005, contaba con 78 años ha sido condenada a seis meses de cárcel, que se sustituyen por una multa de 3.600 euros, después de que en dicha fecha arrollara en la avenida 8 d'Agost de Vila a un motorista que, a consecuencia del accidente, sufrió heridas graves. El siniestro se produjo después de que la acusada se saltara una señal de 'stop', según el informe policial.
Dicha sentencia, dictada por la magistrada Martina Rodríguez, titular del Juzgado de lo Penal número 2 de Eivissa, no es firme ya que ha sido recurrida. La mujer que presuntamente causó el accidente, y que no podrá conducir durante un año y un día, aseguró durante toda la causa que sí se había detenido en el cruce, respetado la señal y entrado en la vía principal cuando creía que ya no pasaba nadie.
La víctima, un hombre que se desplazaba en una Harley Davidson, estuvo hospitalizado cerca de un mes y precisó ser intervenido quirúrgicamente. Según la sentencia, en la que se recoge que el afectado padece distintas secuelas, y que ya sido indemnizado por ello, necesitó 203 días en curar.
En el cruce
El accidente tuvo lugar sobre las diez y media de la mañana del 28 de septiembre de 2005 cuando el Volkswagen Polo en el que iba la acusada salía de la calle ses Feixes para incorporarse a la avenida 8 d'Agost.
«Al llegar a la intersección de ambas calles, lejos de detenerse, respetando la señal de 'stop, que le afectaba, cruzó la primera vía compuesta por dos carriles, dirección a Eivissa, pero al llegar a la dirección contraria, dirección a Talamanca, [entonces no había mediana de separación como ahora] que es la que se incorporaba colisionó, con la motocicleta», establece como probado la sentencia.
La juez, a la hora de argumentar su decisión, se basa también en la declaración que efectuó un testigo presencial del accidente, que ratificó que la conductora no había hecho correctamente la parada, así como en el informe policial. En este último recogió que no había huellas de frenada del motorista que indicara que el coche ya estuviera plenamente dentro del carril.