El fuego no deja descansar al valle de Morna. Ayer, sobre la una de la tarde, comenzó un incendio forestal cerca de la zona conocida como es Forn de Sasch que, finalmente, podría resultar devastador. Hasta cientos de hectáreas podrían quedar calcinadas. Todo dependerá del viento.
El incendio comenzó en la parte baja de la falda sur de los montes de Morna. Al principio no había mucho viento, pero ya a las tres de la tarde soplaba con demasiada fuerza. El fuego ascendió por la ladera hasta llegar a la cima y comenzó a bajar la montaña por la vertiente norte hasta acercarse a sa Cala de Sant Vicent.
Todos los medios disponibles se pusieron al servicio de esta extinción. Poco antes del anochecer, hubo que dejar de trabajar y confiar en que los daños durante las horas de oscuridad fueran los mínimos. La buena noticia es que no hubo víctimas. La Guardia Civil desalojó al menos seis casas en la zona de es Forn de Sasch, pero anoche, al cierre de esta edición, se estaban realizando más desalojos en la falda norte, informó a última hora el alcalde de Sant Joan, Antoni Marí Marí Carraca.
Al lugar del incendio se desplazó el presidente del Consell d'Eivissa Xico Tarrés, y el conseller de Medi Ambient, Albert Prats. También estuvieron en la zona la consellera d'Interior, Pilar Costa y, desde Mallorca, voló el conseller de Medi Ambient, Gabriel Vicens.
Carretera cortada
Al cierre de este edición, Albert Prats explicó que el fuego ya había cruzado la carretera de sa Cala de Sant Vicent, que había tenido que ser cortada al tráfico. Más personas tuvieron que ser desalojadas de sus casas por precaución.
Sobre las siete de la tarde, en rueda de prensa improvisada, Vicens se dirigió en primer lugar a los periodistas en la zona del puesto de mando, situado al pie de la falda sur de Morna. En ese momento, habló de unas 50 hectáreas, sin embargo, se espera que, finalmente, sean muchas más, tal vez cientos. Vicens explicó que el contingente aéreo de un Canadair procedente de Mallorca se reforzó con otros dos Canadair y un Air-Tractor, así como con tres helicópteros del Ibanat y uno de la Dirección General de Emergencias, al que se añadirá el quinto, de la Unidad Militar de Emergencias (UME). En tierra trabajaron medio centenar de técnicos del Ibanat, 26 efectivos de los Bombers del Consell d'Eivissa y miembros de Protección Civil. Además, la Dirección General de Emergencias solicitó la presencia del personal de tierra de la UME.
Pasadas las diez de la noche, Albert Prats dijo que 150 soldados de la UME llegados desde Valencia se incorporarían a lo largo de la noche a los trabajos de extinción con 16 vehículos, cuatro de ellos nodriza.
La Dirección General de Emergencias mantuvo todo el tiempo el nivel de riesgo 1 decretado a principios de la tarde por la proximidad de viviendas a esta zona.
Anoche, el fuego avanzaba sin control y la sensación era de desesperanza en la zona.