El joven turista británico Robert Marccuio, de 24 años de edad, murió ayer tras precipitarse por el balcón de su habitación, situada en una cuarta planta del hotel es Pins de la bahía de Portmany, en la calle es Caló de Cala de Bou, perteneciente al municipio de Sant Josep, informaron ayer desde la Comandancia de la Guardia Civil de Balears.
El suceso se produjo sobre las cinco de la mañana, cuando Marccuio y regresó a su alojamiento junto con su compañero de habitación. Según explicó este último, Marccuio tenía mucho calor dentro de la habitación, por lo que se asomó al balcón para refrescarse. Al parecer, se subió a la barandilla y se resbaló. El compañero del fallecido también explicó que ambos habían estado bebiendo.
Todo indica que fue un accidente, señalaron fuentes de la investigación, ya que no se han encontrado signos de violencia en la habitación.
Hasta el lugar de los hechos se desplazó una ambulancia del servicio del 061 y una patrulla de la Guardia Civil. Tras un esfuerzo de una media hora, el personal de la ambulancia logró estabilizar al herido y trasladarlo a la Policlínica Nuestra Señora del Rosario, desde donde ayer informaron de que, al llegar, sufría un traumatismo craneoencefálico severo, un traumatismo torácico y abdominal y fracturas a nivel del pelvis y el fémur. El propietario del hotel, Joan Bufí, acudió al establecimiento una vez que fue avisado del suceso. El hotelero explicó que todo apunta a que cayó por accidente al vacío, ya que la habitación en la que se alojaba junto con su compañero no daba a la piscina.
La Marina
Todos los veranos fallecen varios británicos en Eivissa al caer desde sus habitaciones de hotel y en muchos casos ocurre cuando intentan lanzarse a la piscina.
Es el primer precipitado fallecido este año en las Pitiüses. Hace unas semanas resultó herida grave una joven de nacionalidad italiana que cayó desde un segundo piso en el barrio de la Marina.
Alcohol y drogas, claves en este tipo de sucesos
Respecto a cómo evitar que se produzcan sucesos de este tipo, el responsable del hotel es Pins, Joan Bufí, explicó a Europa Press que el componente del alcohol y sustancias estupefacientes es clave para que los jóvenes extranjeros no calibren el peligro de sus «imprudencias temerarias». En este sentido, Bufí señaló que medidas como cerrar los balcones para evitar caídas son descabelladas y apeló a la responsabilidad del turista para evitar este tipo de desgracias.