En lo que va de año se han producido en Balears 98 incendios forestales que han quemado una superficie total de 2.226 hectáreas, una cifra muy superior a la media registrada en la última década, de unas 250 hectáreas quemadas a estas alturas del año.
El gerente del Instituto Balear de la Naturaleza (Ibanat), Eduardo Parga, lamenta que los datos indican que se trata de un año «muy malo» en materia de incendios forestales porque los 98 que se han registrado suponen que en agosto casi se ha igualado la cifra de todo 2010, que finalizó con 100 fuegos.
La media de la década se sitúa en unos 125 incendios anuales, aunque ha habido años con cifras más elevadas, como 2004, cuando se produjeron 172.
También en superficie los datos son negativos en 2011, con 14 siniestros que han superado la hectárea de terreno quemada, según datos facilitados a Efe, que corresponden al registro realizado hasta el día de ayer. Los 84 siniestros restantes tienen la consideración de conatos.
Parga explica que las 2.226 hectáreas quemadas se sitúan muy por encima de las 250 hectáreas de promedio anual del último decenio y superan también la media de la década de los 90, que se situó en unas 1.100 hectáreas al año.
El gerente del Ibanat puntualiza que casi 2.000 de las 2.226 hectáreas quemadas en Baleares hasta ayer ardieron en dos únicos incendios, el registrado en la Sierra de Morna de Ibiza a finales de mayo donde se quemaron 1.576 hectáreas y el que tuvo lugar en la primera semana de julio en Artà, cuando ardieron 373.
«Solo dos incendios de semejante magnitud, producidos ambos en unas condiciones climatológicas muy malas, empañan cualquier esfuerzo de prevención y extinción», ha lamentado Parga.
El principal responsable de la extinción de incendios forestales en Baleares explica que hasta esta última semana, la temporada estival no estaba siendo excesivamente cálida «pero la primavera fue muy seca, sin precipitaciones relevantes desde el mes de abril, y ha hecho que el combustible ya estuviera de por sí muy seco cuando comenzó el verano», detalla sobre el estado de la vegetación.
Parga ha alabado «la excelente labor» llevada a cabo por los distintos organismos de extinción de incendios este verano y ha destacado «la buena colaboración entre bomberos, agentes medioambientales y personal de la Conselleria de Agricultura, Medio Ambiente y Territorio, en un año complicado en el que todos los esfuerzos son necesarios».
El gerente de Ibanat ha remarcado, que en estos días en los que la comunidad está en alerta meteorológica por elevadas temperaturas «la colaboración está siendo todavía más estrecha si cabe».