La Audiencia de Palma ha archivado la acusación por violación contra un príncipe saudí denunciada en Eivissa en el verano de 2008 por una joven modelo, al entender que la mujer dio diversas versiones de los hechos que «no cuadran» al alto tribunal autonómico.
En un auto, la sección segunda de la Audiencia estima un recurso interpuesto por la Fiscalía en el que el ministerio público pedía el archivo provisional de la causa por no existir suficientes indicios contra el príncipe saudí A.B.T..
La Fiscalía argumentaba esta petición en las «contradicciones, omisiones e irregularidades» fruto de las cuatro declaraciones que hizo la denunciante ante la policía y dos juzgados españoles, así como ante el ministerio fiscal alemán y las autoridades de este último país.
La joven sostuvo que en la noche de 11 de agosto de 2008 se le invitó al yate que el príncipe tenía atracado en Eivissa, el «Turama», y alguien echó una sustancia en su copa que le hizo perder la conciencia, tras lo que se despertó después de haber sido violada por el miembro de la familia real.
La modelo denunció los hechos dos días después y aportó durante una de sus declaraciones unas fotografías en las cuales se señalaba con una flecha y la palabra «violador» a un hombre que estaba en segundo plano y que no era el príncipe, el cual se encontraba en primer plano.
Esto, unido a «las contradicciones y vaguedades» de sus diferentes declaraciones, así como a que la Fiscalía de Ausburgo ya inadmitió en su día su denuncia por entenderla infundada, llevaron al fiscal al pedir el sobreseimiento.
A este respecto, el tribunal autonómico afirma que «llama la atención las extensas precisiones» que hizo la denunciante en el año 2011 frente a las autoridades alemanas, mientras que ante las españolas declaró con «lagunas, inconsistencias y contradicciones».
«A la vista de las últimas declaraciones de la denunciante, y en el contexto de las actuaciones, ni podemos establecer con alguna solidez, y aún con indicios, lo que ocurrió en la madrugada del día 11 o 12 de agosto de 2008 en el yate», afirma el tribunal, ya que la mujer da a su juicio «diferentes versiones».
Así, los «recuerdos nítidos y afirmaciones aplastantes» de sus últimas comparecencias «no cuadran» para la Audiencia con «las primeras versiones y el estado de inconsciencia o semiinconsciencia en el que dijo estar sumida incluso muchas horas después de suceder los hechos».
«Algo debió pasar, pero no podemos establecer siguiera de modo indiciario lo que pasó», afirma el auto.
Finalmente, apunta que «no se cuenta con datos que permitan mantener con alguna fiabilidad que en esos imprecisos hechos estuviera involucrado como autor, instigador o beneficiario de unos presuntos abusos sexuales el personaje de la familia real árabe».