Sorin I.S., de 34 años de edad, estaba tan borracho y drogado que dice que no recuerda nada de lo ocurrido en la mañana del 26 de agosto de 2012. Esa jornada antes del mediodía, según el testimonio del acusado, había bebido dos botellas de whisky y varias cervezas y también había tomado el contenido de seis bolsas de cocaína. Su afición al alcohol le había hecho perder el trabajo y su pareja le había pedido la separación. Su madre y su hermano son alcohólicos y su padre se suicidó. Fue él quien encontró el cuerpo. Sorin I.S., que también es ludópata, llevaba tres días sin dormir y estaba tan hundido que se quería suicidar.
Así lo aseguró ante los magistrados de la Sección de Refuerzo de la Audiencia Provincial. Su víctima, sin embargo, sí recuerda lo ocurrido. Era su cuñada y en ese momento estaban solos en la casa de ses Figueretes que compartían junto a la hermana de ella y su pareja, todos de nacionalidad rumana.
«Me pidió sexo oral y me negué, me encerré en la habitación, pero él cogió las llaves; entonces fui a la terraza; él gritaba ‘te la voy a meter en la boca' y yo le llamaba ‘hijo de puta'», narró la mujer con la voz entrecortada. «Comenzó a estrangularme, ‘te voy a matar', gritaba; me bajó los pantalones y las bragas, me puse muy nerviosa y sólo quería escapar; se encendió un cigarro y me coloqué junto a la puerta de la calle y allí me golpeó en las costillas y me arrastró por el pelo», explicó la mujer.
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