El joven de 20 años que fue ingresado en estado crítico en la UCI del Hospital San Jorge de Huesca tras permanecer desmayado más de 36 horas en la parte trasera del autobús que cubría la línea entre la capital altoaragonesa y Sariñena ha muerto hoy en este centro hospitalario.
Según han informado fuentes del Departamento de Salud del Gobierno aragonés, el fallecimiento del joven, que sufría de diabetes, se ha producido a últimas horas de la mañana después de que no respondiera al tratamiento médico recibido desde que fue ingresado en estado crítico, sobre las 11.30 horas del pasado domingo.
El joven cogió el autobús de línea a las 19.00 horas del viernes para regresar a su domicilio familiar en la localidad de Sena, pero ya no estableció más contactos ni con la chica con la que había estado en Huesca ni con sus padres, informaron a Efe fuentes de la investigación.
Al parecer, el joven chateó en diversas ocasiones con su amiga a través de una red social durante el trayecto, pero posteriormente ya no llamó para informar de su llegada a su casa.
A la mañana siguiente, según las fuentes, la amiga, ante la imposibilidad de contactar con el joven, llamó a los padres de éste y les preguntó si estaba en casa.
Los padres, después de realizar diversas gestiones para localizar a su hijo, decidieron finalmente denunciar la desaparición de su hijo en la comisaría de Policía de Huesca, cuyos responsables iniciaron de forma inmediata las pesquisas para la localización del joven.
Sobre las 10.30 horas de la mañana del domingo los agentes policiales, tras descartar diversas posibilidades sobre el paradero del joven, lograron contactar con el conductor de autobús de línea y le preguntaron si se había asegurado de que no había quedado ningún viajero en el interior del vehículo.
El conductor se acercó al autobús, que había aparcado junto al recinto ferial de la localidad de Sariñena al no ser necesaria su utilización hasta el lunes siguiente, y pudo comprobar que el joven estaba desmayado en la última fila de asientos del vehículo.
Tras llamar a los servicios de emergencias médicas, el joven fue trasladado en estado muy grave a la UCI del Hospital San Jorge de Huesca, en el que permaneció ingresado desde ayer en estado crítico y sin síntomas de mejora.