El hombre que fue detenido por agentes de la Policía Local de Sant Antoni cuando intentaba huir del restaurante Villa Mercedes, en el que, presuntamente, había entrado a robar ha quedado en libertad con cargos a la espera de juicio, ya que se le acusa por la presunta comisión de un delito de robo con fuerza en grado de tentativa, informaron ayer fuentes judiciales.
No obstante, el juez de guardia, en este caso el titular del Juzgado de Instrucción número 4 de Eivissa, Santiago Pinsachs, le puso como medida cautelar la obligación de firmar todos los días 1 y 15 de cada mes. M.S.E., natural de Toledo y de 49 años de edad, había salido recientemente de prisión.
Los hechos ocurrieron el jueves a primera hora de la mañana, cuando el local estaba cerrado. Para ser arrestado, los agentes lo tuvieron que reducir porque el hombre no se entregaba de ‘motu proprio' pese a encontrarse rodeado y hasta encañonado.
Los agentes también tuvieron que hacerse cargo de una perrita, una pequeña bulldog francés, que, supuestamente, el hombre acaba de sacar de la perrera y con la que habría entrado al restaurante.
El robo se frustró gracias a que unos de los responsables del restaurante avisó a la Policía Local de que el sistema de videovigilancia había detectado movimiento en el interior. Los agentes acudieron al lugar y se encontraron con el hombre, que intentó escapar saltando por la parte de atrás del edificio, si bien fue interceptado.
El hombre llevaba una gran cantidad de monedas y unos 400 euros en billetes. En una bolsa llevaba también numerosas herramientas, como una maza, un formón y objetos cortantes que presumiblemente usó para el robo. Los agentes de la Policía Local investigan ahora si esta persona podría estar relacionada con otros robos cometidos en la zona.
Por ejemplo, en el restaurante s'Avaradero se han denunciado dos robos en pocos días. También en otros establecimientos de la zona también se han denunciado robos en las últimas semanas.