El bebé de 28 días que desde el pasado lunes se encontraba ingresado en la UCI pediátrica del Hospital del Valle Hebrón de Barcelona con múltiples fracturas a consecuencia, presuntamente, de los golpes que le propinaron sus padres, ha fallecido esta tarde.
Según han informado los Mossos d'Esquadra en un comunicado, los padres del bebé, que fueron detenidos el pasado martes acusados de malos tratos, continúan en dependencias policiales a la espera de pasar próximamente a disposición judicial, acusados ahora, tras la muerte de su hijo, de un delito de homicidio.
Las detenciones de los padres se produjeron el pasado martes cuando los Mossos d'Esquadra tuvieron conocimiento de que el bebé había ingresado en estado muy grave en el hospital, ya que presentaba lesiones compatibles con malos tratos.
Según han informado fuentes cercanas al caso, los padres, una pareja que en el vecindario no había creado problemas, actuaron de forma muy fría tras el ingreso en el hospital de su hijo y, aunque mantuvieron algunas contradicciones en su versión de los hechos, inicialmente no fueron arrestados hasta que un informe médico acreditó los malos tratos.
El Síndic de Greuges ha abierto este jueves una investigación para comprobar si los servicios sociales de la Generalitat y el Ajuntament de Barcelona pasaron por alto signos en el entorno familiar que podrían haber evitado las lesiones al bebé.
El Síndic pretende supervisar la intervención de las diferentes administraciones implicadas en la prevención y protección del maltrato infantil y evaluar el funcionamiento de los protocolos de coordinación existentes, para comprobar si ha habido signos previos no detectados «adecuadamente» por parte de los profesionales que han intervenido y que hubieran podido evitar el maltrato y sus consecuencias.
En concreto, el Síndic se ha dirigido a las consellerias de Salud y Bienestar y Familia de la Generalitat y a los Servicios Sociales del Ajuntament de Barcelona para recabar información sobre el asunto.