Aún quedan bastantes meses para que vuelva el buen tiempo, pero Eivissa ya va calentando motores con su duodécima edición de la Flower Power que tuvo lugar en Sant Antoni este fin de semana como el primer gran evento del programa de fiestas de esta localidad. Y tan cercana estaba de la Navidad esta primera fiesta hippie del año que no tuvieron tiempo ni para quitar los adornos navideños, aunque sí fueron cubiertos con serpentinas de flores.
Desde las 23:00 horas comenzaron a llenarse las calles del municipio de disfraces de la época hippy, algunos tan elaborados que parecían directamente sacados de una película de los 60. Los atuendos, aunque dispares, repetían los clásicos pantalones campana y los coloridos estampados. Claro que tampoco faltaron los greatest hits de pelucones rizados, gafas exageradas y collares y diademas con toque ‘hawaiano'. Entre los cientos de asistentes sorprendió, además, una amplia mayoría de personas mayores, que dejaron a la juventud en minoría, rememorando sus años de juventud.
Aunque el salto de generación no impidió que todos se divirtieran bailando y cantando las canciones de ayer, hoy y siempre que nunca pasarán de moda: Mamma mía de ABBA, Rolling on the river de Tina Turner, Venus de Shocking Blue. Así, a golpe de cadera y jarana se llenaron las calles centrales de la localidad, especialmente el passeig de ses Fonts donde habían levantado y decorado una carpa, que integraba los árboles de la plaza, y cuya decoración no escatimó en detalles florales y guirnaldas.
Hubo música, fiesta y sobre todo mucha diversión. No faltó el espectáculo, que se encargó de ponerlo Party Planet por las calles con sus números acrobáticos aéreos y sus gigantes disfrazados. La banda sonora se la repartieron entre los DJs de la carpa, Pharma y Javi Box, con sus proyecciones en las grandes pantallas, aunque también hubo espacio para una banda de rock, como no podía faltar en una fiesta así, que encaramados en un furgón del Ayuntamiento se ingeniaron su propio escenario callejero.