EFE - ITALIA
La sexta etapa del Giro de Italia, que se disputará entre Lauria y
Foggia, de 257 kilómetros de recorrido, es la más larga de la
competición, por lo que puede producir un gran desgaste a los
corredores y todo apunta a que no habrá muchos ataques, pero si se
pruede producir una larga escapada de varios ocrredores consentida
por el pelotón para luego en los kilómetros finales ir reduciendo
la ventaja para conseguir llegar al sprint, es una de esas jornadas
que suelen aburrir en los primeros kilómetros y luego terminan con
un ritmo endiablado.
El trazado de la etapa no es muy duro, con un sólo puerto, el de Valico del Fortino, de tercera categoría, situado en el kilómetro 29 de carrera, muy pronto para que se desencadene la gran batalla, por lo que es casi presumible que se suba a tren sin demasiada prisa.
No obstante, las pequeñas subidas y bajadas son constantes a lo largo del recorrido y solo en el último tramo se pasa totalmente al llano que será donde los equipos con sprinters puden empezar a controlar la carrera hasta la linea de llegada.
Será una jornada en la que es probable que alguien intente la aventura y pedalee muchos kilómetros en solitario en busca del triunfo, mientras que los que buscan los primeros puestos de la general reservarán fuerzas e intentarán superar la jornada sin complicaciones.
La primera vez que el Giro llegó a Foggia fue en 1924, con victoria de Federico Gay. En 1995 el Giro llegó a esa localidad por última vez con victoria de Stefano Allochio.