ESPECIAL PARA UH
La primera etapa del Tour'99 resultó tranquila para los dos
corredores españoles que más posibilidades tienen para acceder al
podio final, Abraham Olano y Fernando Escartín, y supuso el éxito
más importante para el ciclista estonio Jaan Kirsipuu, que se
llevaba la primera llegada masiva de la carrera.
Jaan Kirsippu invirtió en los 208 kilómetros entre Montaigu y Challans 4 horas, 56 minutos y 18 segundos, lo que significa una media de 42'1 kms/hora. En ese tiempo entró el pelotón principal con el belga Tom Steels, el alemán Erik Zabel a continuación y algo más rezagados, los primeros de la general, que no sufre cambios en sus primeros puestos a pesar de las bonificaciones.
El estadounidense Lance Armstrong cumplió su palabra en la salida y conservó el liderato, mientras que el suizo Alex Zulle sigue segundo a siete segundos y el español Abraham Olano tercero a once segundos de la camiseta de líder.
La jornada se inició con mal tiempo y los corredores debieron afrontar los primeros kilómetros con bastante cautela debido a la lluvia y a las carreteras estrechas por las que discurría la carrera en su primera parte, hasta el kilómetro 63 cuando el francés Sebastien Hinault -no tiene ningún parentesco con el mítico Bernard Hinault ganador del Tour cinco veces- intentaba fortuna sin éxito.
Poco después, el que decidía buscar la victoria desde muy lejos era el también francés Thierry Gouvenou, que dejaba la compañía del grupo hacía el kilómetro 78.
El pelotón no reaccionó y el rodador francés logró abrir un hueco que llegó a los 6:45 minutos, lo que le convertía en el líder provisional de la carrera.
El Us Postal de Armstrong tardó mucho en reaccionar y fue hacia el kilómetro 120 cuando sus nueve componentes se ponían en fila de a uno y como de una contrarreloj por equipos se tratase acapararon las primeras posiciones en el pelotón y fueron recortando paulatinamente la diferencia con el escapado.
La aventura de Gouvenou llegaba a su fin en el kilómetro 192 en lo que fue una escapada de 114 kilómetros. Poco antes, en el 183 una docena de corredores, entre ellos los españoles Miguel Àngel Peña, César Solaun y Ginés Salmerón daban con sus huesos por el asfalto afortunadamente sin mayores consecuencias.