EFE - MELBOURNE (AUSTRALIA)
Carlos Moyá continúa conmocionando el Abierto de Australia como lo
hizo hace cuatro años al colocarse en la tercera ronda con una
contundente victoria sobre el campeón olímpico de Barcelona 92, el
suizo Marc Rosset. En una hora y treinta minutos, y con un marcador
de 6-2, 6-1 y 6-3, Moyá se deshizo de Rosset con la misma seguridad
con la que eliminó antes al chileno Marcelo Ríos en primera ronda,
pero incluso con mayor precisión en sus golpes para destrozar a su
rival haciéndole encajar la sexta derrota en siete encuentros, y la
quinta consecutiva.
La victoria de Moyá motivó a Àlex Calatrava a conseguir su mejor registro en el Grand Slam al derrotar a la joven promesa del tenis argentino Guillermo Coria, que venía de ganar cuatro torneos «challengers» y ser finalista en otro, con una racha de 24 partidos ganados. Calatrava se impuso por 6-4, 6-3, 3-6 y 6-2, y ahora se enfrentará al sueco Magnus Norman. Hubo dos derrotas, la del catalán Alberto Martín, que cayó contra el francés Arnaud Clement (15), por 6-2, 6-1 y 6-1, y la de la actual campeona de España Ana Isabel Medina, que desperdició un 2-0 en el tercer set y cedió por 6-2, 4-6 y 6-4 ante la checa Daja Bedanova.
Moyá estuvo formidable con su saque: seis directos y sólo una ruptura, pero lo que más influyó en el resultado fue la tremenda seguridad que mantuvo durante todo el encuentro, con únicamente 12 errores no forzados. Rosset acabó con 48, entre ellos una docena de dobles faltas. Confiado en sus fuerzas, el mallorquín tampoco se escondió y conectó 30 golpes ganadores. La suya fue una demostración de gran superioridad, reflejada en los tres «aces» consecutivos con los que puso final al segundo set. Rosset, mientras, naufragó en sus intentos de controlarle y su raqueta pagó los platos rotos cuando destrozó una de ellas al lanzarla con violencia contra el suelo, tras fallar una volea en el punto anterior al primer «set-point» de la manga inicial.