El III Campeonato de Mundo de Apnea comienza mañana oficialmente en Eivissa con la recepción en la sede del Consell Insular de Eivissa y Formentera y el posterior pasacalles inaugural de la cita mundialista que se prolongará hasta el día 14 de octubre. En esta primera semana, en la que las selecciones de Austria, Colombia y Alemania ya están en el Club Med entrenando, la organización ultima los detalles de las actividades y pruebas previstas, así como las inscripciones.
Precisamente, en la jornada de ayer la organización hizo públicos los primeros datos definitivos sobre los participantes. Así, el total de países que se dan cita en Eivissa para participar en el Mundial 2001 asciende a 35. Asimismo, 17 equipos femeninos han confirmado su participación en la prueba. El responsable máximo de la organización, en manos de la empresa Deep Extreme, y director técnico de la misma es Oliver Herrera quien ha calificado, según se desprende de la página web de la cita, de «ambicioso» el campeonato ya que sólo tiene seis años de existencia, con un lapsus en el 2000 por el terremoto que asoló Turquía y que obligó a su cancelación.
En el plano técnico, Herrera señala en la misma página web que en piscina la logística es fácil, pero cuando la prueba es en el mar existe un riesgo aunque sea mínimo. El apneísta quiere aprovechar al máximo la oportunidad cuando participa en un campeonato de esta índole. «Hay que garantizar la seguridad al 100 por cien», asegura Herrera. La selección española de apnea que acudirá a Eivissa está formada por Jordi Casadevall, Francisco González, Nicolás Sosa y el único representante balear en el mundial, Iván Muñoz.
La apnea, según Herrera, «es depender de uno mismo a 40 metros de profundidad, en silencio, en paz; es difícil de explicar qué se siente». En cuanto a capacidades, Herrera destaca que se necesita gran autocontrol y que es un deporte más accesible de lo que parece, las sensaciones se pueden encontrar a 3 metros».