La Conselleria de Benestar Social del Govern balear aprobó una orden que regula el deporte escolar en Balears hasta la edad de los 16 años y que salió a la luz el pasado 31 de octubre del año 2000. Esta orden prohíbe los derechos de retención hasta los jugadores cadete de segundo año. Dicha norma todavía no está integrada dentro de la Ley del Deporte en la Comunidad balear. En este sentido, el Govern balear propondrá un anteproyecto de esta normativa para el año 2002 y debatirla entre las diferentes instituciones. Posteriormente, el Govern balear tiene previsto llevar el proyecto a efecto para que sea aprobado por el Parlament balear en el 2003 y esté integrada por ley.
La directora general de Deportes del Govern Balear, Joana Petrus, hace una defensa de esta prohibición: «A los menores de edad, no se les puede aplicar el derecho de retención cuando, a estas edades, lo que se pretende en el deporte escolar, es el objetivo de la práctica del deporte. Además, Petrus comentó que « la idea es que los niños puedan tener la posibilidad de marchar libremente a otro club, aunque también tienen la opción de quedarse en la entidad que los ha formado mediante un contrato firmado por el club y el tutor legal del jugador».
Los clubes más modestos de todas las islas se han visto perjudicados ya que corren el peligro de perder un jugador de 15 años al que se ha formado en todas las categorías inferiores sin recibir ninguna compensación a cambio. Sin embargo, uno de los directivos del Rapid, Damián Massanet, se mostró de acuerdo con la aplicación de esta orden: «La verdad es que estoy a favor de que se prohiban los derechos de retención a estas edades ya que no se les puede impedir que jueguen en otro equipo».
De todas formas, Massanet reconoció que «la orden perjudica a los clubes más modestos y favorece a los clubes organizados y con infraestructura». Por su parte, el coordinador deportivo de las categorías inferiores de la Peña Deportiva, Juan Luis Oliver, también se mostró a favor de la prohibición de los derechos de retención hasta los jugadores cadetes: «Ésto beneficia al jugador y pienso que, a estas edades, hay que dejarle elegir libremente el club donde quiera jugar. Una solución es que los clubes de formación se esfuercen para que los chavales se sientan a gusto para que después no se marchen a otro club».