Luis Miguel Pascual SEOGWIPO
Las dudas sobre el estado físico de Michael Ballack en el conjunto
alemán y de Roberto Ayala en el paraguayo centran las horas previas
del choque de octavos de final que hoy enfrentará, por primera vez,
a ambas selecciones.
Nunca antes se habían enfrentado Alemania y Paraguay en toda la historia y, para su primer duelo, tienen objetivos y estados de ánimo diferentes. Triple campeona del mundo, Alemania busca no caer en la comodidad frente a una selección teóricamente inferior, por lo que se han multiplicado los llamamientos a mantener la concentración en el partido de hoy.
El protagonista de ayer fue Ballack, al que una lesión podría dejar fuera de los octavos de final. El jugador del Bayer Leverkusen no se entrenó ayer con sus compañeros y hoy pasará un último test que determinará si está listo para disputar el partido. A la duda del nuevo jugador del Bayern de Múnich se unen las bajas de los centrocampistas Christian Ziege y Dietmar Hamann, y del defensa Carsten Ramelow, que están sancionados y de Joerg Boehme, que tiene problemas físicos, lo que obligará al técnico germano a cambiar gran parte del equipo y, posiblemente, el sistema táctico. Paraguay, por su parte, vive pendiente de la salud de Roberto Ayala, que ayer sufrió un dolor en la pierna y podría tener un problema de aductores.
El sueño de Paraguay es lograr la clasificación para cuartos de final, un resultado al que no han alcanzado en sus anteriores cinco participaciones mundialistas. Este es el gran reto.