La crisis interna que vive la Federación Española (RFEF) ha salpicado a Antonio Borrás del Barrio. El presidente de la Balear ha sido involucrado en un presunto uso indebido de fondos federativos. Según ha difundido la cadena Ser, Borrás ha aprovechado compromisos de las distintas selecciones para hacer turismo de lujo a cuenta de las arcas de la RFEF. El máximo mandatario de la Balear, junto a Juan Padrón -vicepresidente económico de la RFEF-, José María Castillón -administrador-, Juan Espino -otro vicepresidente- y sus esposas, aprovecharon un partido de la sub'20 en Argentina para visitar las cataratas de Iguazú. También en un Europeo sub'18 disputado en Finlandia, los federativos acudieron a Laponia, Estonia y San Petesburgo. Todos los gastos fueron cargados a la Española.
Al margen de Borrás del Barrio, Juan Padrón es el hombre que aparece en el ojo del huracán. Los medios nacionales han denunciado que con motivo del último Mundial, el vicepresidente realizó una gira por Corea, Japón y China en compañía de su esposa, de dos hijas y de una amiga de éstas. Los gastos detour alcanzan los 25 millones de pesetas.
Angel María Villar y Juan Padrón han intentado en Palma dar una imagen de normalidad pese a la crisis interna abierta en el organismo futbolístico. Ambos reconocen que son horas y días duros para la cúpula directiva de la Federación porque los acontecimientos adversos se van sucediendo desde la marcha del secretario general, Gerardo González Otero, con la aparición de informaciones que comprometen personalmente a Padrón y en global a toda la organización, así como con la dimisión «irrevocable» de los miembros del Comité de Competición.
Villar y Padrón admiten que el martes no pasaron muy buena noche, aunque intentaron por la mañana aparentar una imposible calma en medio de la crisis y cumplir con el programa previsto antes de la ansiada junta directiva que se celebrará el viernes en Madrid y la posterior conferencia informativa. Los dos dirigentes darán ahí explicaciones, primero a sus directivos y luego a los periodistas, de todo lo que ha ocurrido y ocurre en la RFEF. De momento, según dijeron en una conversación informal mantenida con los periodistas, aseguran que están tranquilos, con la esperanza de que llegue la calma después de la tempestad.
Padrón tiene claro que emprenderá acciones legales en contra de los «acusadores», que en su opinión son los que tienen que demostrar todo lo que ha salido a la luz, y lo hará por su honestidad propia y por la de su familia. «Hay una trama para intentar desprestigiarme», dijo Padrón, saliendo al paso de las informaciones que sostienen que ha cargado gastos cuantiosos a la RFEF para costear el presunto viaje de familiares suyos al Mundial de Corea y a otros compromisos de la selección. «No soy un caradura ni un tonto para pasar el viaje de mi familia a China y Japón durante el Mundial. Ni la Federación lo ha pagado ni lo pagará», dijo.