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La última valla de Atenas

El ibicenco logra en semifinales un registro de 13.52, su peor marca en estos Juegos

Vivancos finalizó ayer su participación espectacular en cuanto a marcas y objetivos.

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«Está hecho todo un campeón», decía una aficionada al atletismo nada más finalizar la carrera de Felipe Vivancos. Ayer, la pantalla instalada en el salón de plenos del Consell Insular no estuvo tan abarrotada como el pasado miércoles en la carrera que dio la clasificación para semifinales al atleta ibicenco. Aun así, los gritos de ánimo y las ilusiones porque el vallista del Pitiús consiguiese entrar en la final. Era muy difícil, pero todos los allí presentes destacaron, una y otra vez, la garra y el valor de Felipe.

Felipe, contento
El atleta del CA Pitiús declaró a Televisión Española que se mostraba «contento» por la carrera que había realizado, a pesar de haber quedado último, porque «me he encontrado casi mejor que los dos días anteriores. Estaba muy complicado entrar y por eso buscaba el récord de España», destacó.

Vivancos cree que el hecho de tener que conseguir la mínima olímpica hasta el último instante le ha hecho «quemar muchos cartuchos», afirmó el vallista, quien añadió que aun así «he corrido a un gran nivel».

El atleta ibicenco reconoció que ha hecho marcas «más o menos buenas», pero que a partir de ahora intentará «afinar algunos detalles que me hagan estar cerca del 13"30».

Nuevamente, los políticos, familiares, amigos y compañeros quisieron estar, desde la distancia, con Felipe. La pertiguista Mar Sánchez comentó a la conclusión de la carrera que su compañero «ha hecho una gran temporada y una gran Olimpiada», dijo.

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