El partido Real Madrid-Deportivo de La Coruña es uno de los más interesantes de la sexta jornada de Primera División, en el que ambos equipos buscarán los tres puntos para salir de la crisis en la que parecen sumidos en estos inicios de campeonato. Con quince puntos disputados hasta el momento, ni Real Madrid ni Deportivo están entre los mejores. No están clasificados en puestos de Liga de Campeones, ni en puestos de UEFA, lo que significa que ya se habla de crisis, máxime si se tienen en cuenta los resultados europeos y el hecho de que los madridistas ya han cambiado de entrenador. El Madrid, al menos, ha dado muestras de orgullo ante el Roma, en Liga de Campeones, y la victoria del pasado martes ha sido un ungüento mágico para sus heridas. Además, vuelve a jugar en el estadio Santiago Bernabéu. El Depor llega herido y con la vitola de equipo más goleado, junto al Zaragoza.
En las filas blancas la gran duda reside en el concurso de Ronaldo. El delantero brasileño está prácticamente descartado para el encuentro, aunque hoy pasará la última prueba para ver si está en condiciones de entrar en la convocatoria. El delantero madridista llevó a cabo un trabajo específico en el gimnasio y con los fisioterapeutas después de sufrir una contractura en los isquiotibiales derechos en el partido contra el Roma del pasado martes, algo que le impide trabajar al mismo ritmo que el resto de sus compañeros. Los médicos sólo le darán luz verde si no tiene molestias y la ecografía no revela nada negativo, pues la lesión le afecta al bíceps. Está pendiente de evolución 24-48 horas, pero sigue siendo seria duda.
Con esta situación, los tres puntos se tornan fundamentales aunque falten ocho meses completos de competición. Valencia y Barcelona, siguen igualados en casi todo, aunque ya comienzan a marcarse diferencias. Los levantinos perdieron en Europa, en el feudo del Werder Bremen, 2-1, mientras que los catalanes volvieron a gustarse frente al Shakhtar, 3-0. El Valencia visita a un Betis que no está para tirar cohetes y mucho menos para permitir que los puntos se marchen del Ruiz de Lopera; mientras que el Barcelona recibe en el Nou Camp al Numancia con la intención de romper la bicefalia de la clasificación en su beneficio. El Espanyol, tercero, quiere seguir instalado entre los grandes y visita a un Albacete que todavía no conoce la victoria, lo cual siempre es un arma de doble filo. Justo en la misma situación está el Atlético de Madrid, cuarto, que viaja a Anoeta para medirse a la Real Sociedad con el casillero de victorias a cero e instalada en el más incómodo de los puestos, en el último. El Osasuna-Málaga promete igualdad. Los dos equipos están instalados en la parte alta de la tabla y nadie querrá perder tan privilegiadas posiciones. Es el mismo caso del Sevilla, que está teniendo un buen inicio y que en su visita a Santander intentará sacar provecho.